Comer para llevar. Del restaurante a casa.
Comer para llevar. Del restaurante a casa.

Bares y restaurantes cerrados en Mataró, qué servicios pueden ofrecer?

Los cercanos 15 días los bares y restaurantes no podrán abrir, por el que muchos tendrán que plantearse un escenario como al confinamiento: comer para llevar y a domicilio.

La decisión del Gobierno de la Generalitat de Cataluña de cerrar bares y restaurantes de manera inmediata a partir de viernes, día 16 y en principio durante 15 días, ha sido tanto repentina cómo contundente por un sector que no ha conseguido volver en plenitud a su tarea anterior a la pandemia. Por un lado, tuvieron que cerrar durante el confinamiento; y por la otra, se han encontrado con muchas restricciones durante la reapertura. Reducciones de aforo, imposibilidad de servir a la barra, terrazas con restricciones y distancia obligatoria... Y ahora, un nuevo cierre. Qué solución hay?

Muchos restaurantes de Mataró y Maresme se apuntaron al sistema de comer para llevar y servicio a domicilio durante la pandemia. Después de unas primeras semanas de incertidumbre, muchos establecimientos se apuntaron a traer su comida a casa de los mataronins y mataronines. Es el caso de restaurantes como La Marineta, Dos Cocineros, o Lumber Restaurante, que se reinventaron con este tipo de servicio y que ahora volverán a activarlo. U otros como Sésamo Negro, que se apoyó en su Sésamo Expreso durante la pandemia y que volverá a ser un puntal durante estos días, así como el caso del Su. cocina japonesa, que también activó el sistema de take away y delivery. Sea para llevar o con servicio a domicilio, los restaurantes mataronins ya están anunciando en sus redes qué planes tienen para los próximos días y los que no, seguro que lo irán tirando próximamente.

Algunos de los mencionats explican que el único que intentarán hacer es "sobrevivir", por una situación que los ha caído de golpe y sin esperarlo cuando todavía no están ni recuperados del confinamiento y las restricciones posteriores.

La idea general será la de adaptarse en espera de que no sean más de 15 los días de cierre establecidos. Bares como Ohana, en la calle Santa Benet, no tendrán servicio a interior ni a terraza, pero sí que ofrecerán bocadillos y cafés para llevar, una apuesta que seguro seguirán otros muchos establecimientos. Cómo por ejemplo el Frankfurt de laRiera , que seguirá abierto para servir sus clásicos bocadillos para llevar, sin poderse comer allá mismo por las restricciones.

El Gremio de Hostelería de Mataró y Maresme encara no se ha pronunciado oficialmente porque se encuentra a la espera del que pueda decir el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que podría matizar estas medidas o directamente tumbarlas si considera que afectan derechos fundamentales.

El TSJC urge el Gobierno a concretar las restricciones y derechos fundamentales

La sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha requerido el Gobierno porque concrete las restricciones que pretende aplicar y que afectan derechos fundamentales para poderse pronunciar. Le mujer de plazo hasta las 13 horas de este jueves. También pide que se corrijan defectos de forma, puesto que el documento presentado no incluye ni firma ni número de decreto ni tampoco data. El TSJC tiene que autorizar las medidas para contener la covid-19 que el Gobierno anunció miércoles y que quiere que entren en vigor esta noche.

El sector de la restauración participará este viernes a mediodía en una protesta a la plaza Santo Jaume de Barcelona en contra de la decisión del Gobierno de cerrar bares y restaurantes. La manifestación, que tiene el apoyo de organizaciones como el Gremio de Restauración de Barcelona, la patronal del ocio nocturno FECALON o la asociación de bares y restaurantes del colectivo LGTBI ACEGAL, pretende denunciar "la arbitrariedad" de las medidas. Además, los restauradors se quejan que un nuevo cierre supone un golpe económico muy fuerte, del cual muchos quizás ya no se levantarán, e incluso puede propiciar que el ocio derive en espacios privados donde hay muchos menos controles sanitarios.

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