Capgròs
En Mataró hay unos 3.400 pisos en manso de bancos, empresas y grandes tenedores, en los cuales oficialmente no vive nadie. Cerca de un 25%, pero, están ocupados ilegalmente. Estas ocupaciones se deben de en buena parte a que el Ayuntamiento, a pesar de la cantidad de vivienda vacía en la ciudad, no tiene prous viviendas por aquellas familias que se han quedado sin casa y reclaman un techo donde vivir. Los cerca de 250 pisos que gestionan el consistorio y PUMSA hacen corto. Las ocupaciones ilegales se multiplican y algunas de ellas tienen carácter conflictivo, generando problemas de convivencia vecinal. Ante esto el consistorio empezará esta primavera la campaña de inspección para detectar estos pisos vacíos, en propiedad de grandes tenedores, empresas o bancos. El objetivo: que sus propietarios los pongan al mercado o bien los cedan a la bolsa de alquiler social.
El objetivo de las inspecciones es conseguir más pisos para personas que necesitan un techo
Pasada Semana Santa empezará la campaña que este año se centrará en 368 viviendas repartidas por toda la ciudad. "Nos preocupa mucho el problema habitacional que se sufre en Mataró", explicó la regidora de Urbanismo, Núria Calpe. Para intentar corregirlo el consistorio se dotó de una ordenanza que movilice en los mercados estas viviendas por parte de los propietarios. Las inspecciones se harán en el marco de la Ordenanza municipal reguladora del procedimiento sobre verificación de viviendas vacíos, que pretende conseguir la movilización en el mercado de estas viviendas por parte de los propietarios. Así se quiere favorecer que aumente la oferta de pisos destinados a la bolsa de alquiler social y a la vegada luchar contra las ocupaciones ilegales, que están proliferando precisamente por la gran cantidad de pisos vacíos que hay en la ciudad.
Hay ocupaciones que responden a la pura necesidad de un techo, pero otros tienen carácter conflictivo y delinqüencial
Las 368 viviendas que se inspeccionarán conforman cerca del 10% del total que se calcula que hay en la ciudad. "Son pocos, ya nos gustaría inspeccionarlos todos en tan sólo un año, pero las herramientas y personal que podemos destinar son los que son", resolvió Calpe. La mayoría de estos pisos se encuentran a Cerdanyola (87 en el norte y 64 al sur del barrio), seguido por Rocafonda (67) y el Ensanche (50). Las inspecciones se realizarán presencialmente a través de equipos de inspectores que se están preparando a los servicios de Licencias y de Vivienda.
Un juzgado específico
El inicio de las inspecciones se ha anunciado la misma semana que el consistorio ha pedido, en una declaración institucional que el nuevo juzgado que se tiene que abrir en la ciudad esté dedicado específicamente a tratar las ocupaciones delinqüencials de viviendas. Además, reclama que haya fiscales especializados en este tema, que se unifiquen los criterios legales para combatirlo y que Mossos y Policía Nacional se impliquen al tumbar las mafias organizadas. Según una estimación del consistorio, unos 850 pisos vacíos en Mataró (cerca del 25% de los 3.400 compabilitzats) están ocupados ilegalmente. Un fenómeno que responde a menudo a la pura necesidad de los ocupantes de un lugar donde vivir, después del gran número de desahucios que se han vivido en la ciudad debido a la crisis económica; pero que en otros casos tiene un perfil conflictivo y delinqüencial, que es el que se quiere combatir.
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