Capgròs
Entrena, come y descansa. Podríamos decir que es la Santísima Trinidad de una buena rutina para estar en forma. Tener un buen descanso es fundamental para nuestra salud, igual que mantener una dieta equilibrada y hacer ejercicio regularmente. Una noche de sueño reparador nos permite cumplir mejor las exigencias diarias, ayuda a controlar el estrés y mantener un estado de ánimo equilibrado.
A pesar de que nuestra rutina es muy agitada, no podemos olvidar que el descanso es fundamental para mejorar nuestra calidad de vida y mantenernos activos. Cuando dormimos, el estado de relaxament físico y mental que conseguimos nos permite recobrar energía y afrontar de forma óptima una nueva jornada. No dormir bastante o dormir mal puede afectar de varias maneras tanto nuestra salud física cómo mental.
Un buen descanso implica dormir las horas necesarias según tu edad. Los especialistas recomiendan para los adultos una media de 8 horas de sueño diarias. Para conseguirlo puedes adoptar pequeños y sencillos hábitos, cómo establecer una hora fija para ir a dormir, evitar consumir comidas pesadas antes de hacerlo y no exponerte en pantallas (televisión, ordenador o móvil) al menos una hora antes de acostarte.
Facilitas la regeneración celular
Cuando dormimos nuestra piel también descansa. Las células se regeneran y oxigenan con más facilidad. Específicamente a los ojos, la Rodopsina (pigmento sensible a la luz) consigue renovarse recuperándose del esfuerzo realizado durante el día.
Ayudas a mantener un peso saludable
Según estudios científicos, cuando nuestro cuerpo no descansa bastante tiende a acumular más grasas y se hace más difícil quemarlos. Cuando duermes bastante, tienes más probabilidades de mantener el peso o incluso perderlo más fácilmente.
Controla dolencias cómo la hipertensión y la diabetes
Si no descansamos bastante, estamos corriendo el riesgo de aumentar las probabilidades de contraer dolencias cómo la hipertensión o la diabetes por el incremento de la producción de hormonas cómo el cortisol, también conocida cómo la hormona del estrés.
Cuida el coro
Durante el sueño también disminuye nuestra frecuencia cardíaca. Esto favorece el trabajo de reparación que hacen las células coronarias y los tejidos. En este momento, nuestro organismo también libera la melatonina (también conocida cómo la hormona del sueño) y la hormona del crecimiento.
Mejora tu capacidad intelectual
Dormir bien es fundamental para mejorar la capacidad intelectual. Nuestro cerebro necesita desconectarse varias horas para así procesar toda la información que va acumulando durante el día.
Ayuda a la coordinación
Una actividad psicomotriz no se puede ejecutar correctamente si nuestro cerebro no está descansado. Si conduciremos o realizaremos un trabajo que implique riesgos, el descanso no solo es aconsejable, sino que es imprescindible.
Fuente: ACHS
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