Capgròs
Bares y restaurantes lo están pasando realmente mal de acá la crisis del coronavirus. No existe la fórmula mágica para sacarlos de esta situación, pero en el siguiente artículo se exponen algunas cuestiones que pueden tener su importancia en tiempo como el actual. "Inversiones que sean necesarias e imprescindibles por ley para garantizar la seguridad de trabajadores y clientes". Así lo resume Guillermo López, del restaurando Viña Nueva, en un detallado artículo de Mónica Ramírez a la revista gastronómica digital 7Caníbales. El ejemplo "lo tenemos con la ley antitabaco. Tenemos la lección aprendida. Fueron unas inversiones brutales, pero ahora creo que no ha habido grandes errores al realizar inversiones que no puedan ser amortizadas."
Por otro lado, en relación a servicios como el delivery, Guillermo López cree que en general desaparecerá un golpe se normalice la situación. "Si no me equivoco, el delivery registraba un incremento anual del 12%. Durante la pandemia he encontrado artículos diciendo que este porcentaje ha aumentado entre un 40 y un 60%. Y se estima que, cuando todo acabe, el crecimiento se mantendrá en un 15%. Es decir, que subirá sólo tres puntos respecto al que vendía creciente. Esto quiere decir que si alguien está haciendo grandes inversiones en delivery no sé yo si será un servicio que aguantará estos volúmenes durante mucho tiempo."
El acondicionamiento de terrazas, en otro sentido, es una de aquellas inversiones que cuenta con bastantes números para convertirse en un camino de largo recorrido. "Cada fin de semana, sobre todo en la temporada de calçots, rechazábamos un porcentaje considerable de clientes porque no los podíamos acoger", explica Guillermo López. "Hicimos números para ver si era rentable condicionar la terraza, y nos dimos cuenta que aunque sólo lo aprovecháramos los fines de semana salía por anticipado."
El profesor colaborador de Estudios de Economía y Empresa de la UOC, Iván Ciudad, apunta otro factor que puede ser importante; comunicación, marketing y digitalización. El profesor considera que una inversión fundamental rae en la imagen del local. "Aquellos restauradors que hayan invertido con el objetivo que el cliente asocie su imagen, no sólo a la calidad de su producto y servicio, sino también a un ambiente más saludable e higiénico con renovaciones de aire, frecuentes limpiezas y desinfecciones, tendrán un plus de confianza de los clientes".
Y el futuro? Por el especialista en economía, Iván Ciudad, "todo apunta a una depresión muy profunda y dolorosa para muchos. Nuestro país no se caracteriza por recuperaciones rápidas de las crisis. No fue así, por ejemplo, durante la crisis financiera del año 2008." Ciudad añade que "nuestro tejido económico está formado mayoritariamente por autónomos, micropimes y pymes. Actualmente hay más personas dependiente de un 'salario' público que trabajadores del sector privado cobrando una nómina. Así pues, los datos y los locales cerrados que veo en las calles no me hacen ser optimista en estos momentos. En definitiva, vivimos una situación mucho, muy compleja que nos plantea un futuro de incertidumbre para muchas personas".
Finalmente, el editor de una de las revistas científicas más prestigiosas, TheLancet , Richard Horton, remarca que "más que una pandemia, estamos viviendo una sindèmia. El que estamos viviendo es una crisis de muchos tipos, sanitaria por supuesto, pero también social y política." Todas estas reflexiones se pueden encontrar en este interesante artículo.
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