Capgròs
Ya nos encontramos a la época veraniega del año, marcada por las altas temperaturas, las visitas a la playa y la necesidad de mantenernos hidratados. Más allá de los dos litros de agua recomendados al día, también tenemos que comer alimentos frescos y ricos en vitaminas para asegurarnos de tener las defensa muy altas para soportar los cambios de temperatura comunes en estos meses. Uno de los platos más versátiles y adecuados se la ensalada, que podemos elaborar combinando diferentes tipos de lechuga, legumbres, verduras y demés. En esta ocasión nos queremos centrar en la lechuga iceberg, uno de los más conocidos y que siempre supone una garantía de éxito. Os explicamos el porque, además de destacar sus propiedades, beneficios y algunas curiosidades adicionales.
El origen de la lechuga iceberg
Siempre lo podemos encontrar disponible en las neveras de nuestro supermercado de confianza, pero sabíais que su origen está en Estados Unidos? Fue al 1894 cuando la W. Atlee Burpee Compañero introdujo este tipo de lechuga al mercado americano y los productores de California la empezaron a enviar por todo el país. Puesto que inicialmente se empaquetaba en hielo y posteriormente en vagones refrigerados, el nombre de "iceberg" ganó fuerza. Su gran éxito es encuentra en que en 30 era la única que estaba presente en los hogares norteamericanos, hecho que impulsó su popularidad ligada al nacimiento y extensión de los supermercados. Desde aquel momento hasta la actualidad, no frenó en su carrera para expandirse por todo el planeta, llegando también a nuestro país y consiguiendo la medalla de "la lechuga más exportada del mundo".
Beneficios y propiedades de la lechuga iceberg
Es cierto que la lechuga iceberg es uno de los tipos que más criticado ha estado por parte de los nutricionistas debido a presentar un perfil nutricional más deficiente que lo otras variedades. Sin embargo, uno de sus "pros" principales es el hecho que se encuentra disponible durante todo el año y tiene un alto grado de preservación durante muchos días. Presenta hojas redondeadas, con una forma parecida a una col, y su textura es crujiente. Esto hace que sea la opción más ideal como guarnición o bien para acompañar platos cómo por ejemplo hamburguesas en pan o bien como rellenado de sandvitxos, puesto que aguanta bien la combinación con salsas y otros ingredientes.
Por estos motivos forma parte de la dieta de miles de personas, además de que se trata de un vegetal que solo aporta 17 kilocalorías por 100 gramos puesto que está compuesto por un 95 % de agua. Es ideal para asegurarnos de estar hidratados a diario y sobre todo en verano, puesto que es ligero, fresco y presenta vitaminas antioxidantes cómo la A, la C y la E (ideales para cuidar la vista y la piel). La lechuga también es rico en vitaminas B y K, además de en potasio, ácido fòlic, hierro y calcio. Es decir: no puede faltar a nuestra dieta veraniega ni durante el resto del año!
Fuente: Directo al paladar
Comentarios