Capgròs
Por Cuaresma, buñuelos. Buñuelos de viento o del Ampurdán, que también se dicen brunyols. Buñuelos de bacalao, también. O de dulces hay incluso de rellenos. Un clásico presente, sobre todo los viernes, en panaderías y pastelerías. También una receta bastante fácil de hacer. El que quizás no sabe quién hace queixalada a un buñuelo es que mientras se llena la barriga está alargando una historia gastronómica de once siglos. Como mínimo!
Los buñuelos de viento, muy populares durante la Cuaresma, tienen un origen muy antiguo. Los judíos sefardites ya los elaboraban desde el siglo X, y también encontramos referencias a A el-Andalus en el siglo XIV. Inicialmente, su composición era un demasiado hecho de harina de trigo, leche, azúcar, huevo y salvo que se freía en forma de bolitas. Con el tiempo se han incorporado otros ingredientes cómo el anís, el limón, la canela o la vainilla.
Su consumo durante la Cuaresma , un periodo de abstinencia y de dejú del Cristianismo, rae en la necesidad de consumir algo dulce y calórica que compensara las renuncias a otros alimentos. Especialmente, los Cristianos dejaban de consumir carne y pez durante toda la Cuaresma, y solo los viernes hacían la excepción de comer pez
Los miércoles y viernes de Cuaresma
La tradición de los buñuelos se estableció en los miércoles y los viernes de Cuaresma, y así se mantiene todavía en muchos hornos y pastelerías del país. Los buñuelos de viento, los más populares, tienen un tamany pequeño, de alrededor de tres centímetros de diámetro y se empolvoren con azúcar un golpe son fritos. El otra modalidad, también popular, son los buñuelos del Ampurdán, conocidos como "brunyols", algo más grandes, ovalados y con un agujero enmedio.
Como hecho curioso, en algunos países de Llatino-América consumen unos buñuelos similares a los que se hacen aquí como postres del día de Nadal. En otros países europeos –Italia, Francia o Países Bajos- también hacen de similares. También a la India o a Turquía tienen dulces que se asemejan.
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