Capgròs
Cantaban los Pets en una de sus canciones más célebres que el agosto es pesado y perezoso y seguramente no los faltaba razón. El octavo mes del año es el que la gran mayoría consagra a vacaciones y todo adquiere un tono diferente de julio, frenético o de septiembre, cuando la escuela impone rutina a pequeños y también a los grandes. En Mataró, por suerte, los últimos años el agosto cultural se ha atrevido a desafiar la norma y presenta buenas noticias. Una de las que no solo tiene nombre sino también toda característica propia es el Posidonia Fest. Y este año llega a la tercera edición con novedades importantes cómo una jornada inaugural gratuita.
Carlos Moreno, director del Posidonia Fest, tiene claro cuál es la esencia del festival. "El hecho de montar un escenario levantado solo 50 centímetros de tierra y ser abierto, convierte todos los conciertos en espectáculos únicos, por un lado, por la proximidad con el espectador y, por otro lado, por el espectáculo natural con la puesta de sol y el mismo Puerto de Mataró" y añade que "por el sello discográfico Microscopi organizar el Posidonia Fest es una oportunidad para salir del despacho, pisar territorio y acercarnos al público. Podríamos decir que es la cirereta de nuestro pastel que es el trabajo que hacemos, que nos gusta y la disfrutamos".
- Las entradas y abonos por el Posidonia Fest se pueden comprar aquí
Un entorno precioso
El Posidonia es, de facto, el festival propio del Port de Mataró. La ubicación, las citadas puestas de sol, la brisa que a finales de agosto parece recordar que se supone que es fresca, todo suma al convertirlo en un entorno propicio. Moreno explica que "Como mataroní encuentro imprescindible que un espacio cómo este también participio de la cultura y se abre a la ciudadanía. Las ganas de la dirección y la remodelación que se ha hecho son la fórmula perfecta para disfrutar de un espacio único a la ciudad"
El cartel ambicioso
A un mes ver, el mejor que puede hacerse respete el Posidonia es comprar el abono. Un festival de proximidad que un año más ha sabido encontrar un sello propio en la programación, cosa que no es fácil. "Combinamos artistas más y menos mediáticos, pero en todos los casos hablamos de músicos con una excelente trayectoria musical y diferentes premios a sus hombros. Todo esto sin olvidar los artistas del Maresme salidos de un llamamiento que, por segundo año, ha sido un éxito", asegura su director.
El cartel es ecléctico y hay desde los solo más mediáticos cómo Albert Pla o la maresmenca Rita Payés a otros que, seguramente, suenen por primera vez a quien los escuche o lea. El Posidonia, en este sentido, intenta cultivar la curiosidad y se le nota que es un festival impulsado por un sello discográfico. "Me gustaría que la gente venga con la mente y las orejas muy abiertas y descubra al resto de músicos, menos mediáticos pero de un nivel muy alto", desea Moreno.
Los periodistas, pesados, cuando se presenta un festival siempre preguntamos por el siguiente y el futuro. Los protagonistas, elegantes, suelen encontrar bien la respuesta y es en esto que los impulsores del Posidonia Fest se imaginan un futuro en el que puedan "crecer artísticamente, en número de conciertos, tipos de públicos, diferentes artes, etc. Pero todo ello sin perder la esencia del festival que es ahora. Siempre respetando la proximidad con el público y la simbiosis con el entorno". Que así sea.
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