La salida más esperada de los Gigantes de Mataró

El pasacalle de reencontrada viene a comenzar los actos de Sant Jordi

Seguro que es una cita más que subrayada a muchas agendas familiares. Ahora ya hace demasiados meses que las figuras de la ciudad restan somnolents cerradas a Can Marfà y ya se sabe que pocos efectos directos hay más claros a Mataró que aquel que liga cuando salen los Gigantes y cuándo hay la calle llena de niños para verlos. Enhorabuena para los que han sido esperándolo: este sábado 25 se acaba la cuenta atrás.

Este sábado por la tarde las figuras institucionales que saldrán a la calle por Sant Jordi se avanzan y ya van tirando camino de Can Marfà hasta el Ayuntamiento, donde se estarán hasta que haya pasado la fiesta del 23 de abril. Esto quiere decir, de facto, el primer pasacalle en mucho tiempo de las figuras que con la de meses que hace que no bailan seguro que tendrán las mismas ganas de hacerlo que los niños mataronina de verlos.

Pasacalle de Can Marfà en el Ayuntamiento

• Sábado día 25 a 2/4 de 7 de la tarde
• Reorregut: passatge de Can Marfà, camí Ral, carrer de Pascual Madoz, carrer de Sant Pelegrí, baixada de les Espenyes, carrer d’en Xammar, carrer de Sant Cristòfol, carrer d'en Pujol, La Riera y Ajuntament.

Gigantes, Nans, Drac i Dragalió

Por Sant Jordi, por el que ya queda menos de un mes, ya se sabe que son fijas las citas con la Trobada de Gigantes primero y con la Fogonada después. También a mediodía el Dragón y el Dragalió irán al Libro Gigante de Cuentos. Por eso la representación que irá de Can Marfà al Ayuntamiento este sábado la conformarán el Dragalió y el Dragón, a ritmo de sus tabalarers y detrás la Familia Robafaves al completo: primero los Enanos y después con la orden habitual la Toneta, en Maneló, la Giganta y en Robafaves. A ritmo de flabiols, está claro.

Ya hace unos años que estos 'traslados' que antiguamente se hacían medio a hurtadillas o incluso en camión han acontecido cómo unos primeros tastets de la fiesta que anticipan, cuando es la ida antes de Sant Jordi o un páselo bueno y hasta bien pronto cuando es el regreso hacia Can Marfà. El hecho es que es un pasacalle que sirve para matar el cuquet del fanatismo más extendido entre los niños mataronina: las ganas de ver las figuras cuando todavía quedarán 4 meses por Las Santas.