El doble crimen de Susqueda acontece libro de la periodista que más lo ha investigado

La periodista Tura Soler se ha adentrado en el misterio del doble crimen al pantano de Susqueda (Selva) en un libro que, también, reivindica el periodismo de sucesos: "El de picar piedra, el de enfangarse las botas, el de empantanegar-se, nunca mejor dicho en este caso". La periodista dedica 'El pantà maleït' (La Campana) y 'A orillas del pantano' (Península) a "el amigo invisible", un tipo de confidente anónimo que, durante todo este tiempo, le ha dado pistas para estirar el hilo e investigar unos asesinatos que van colpir la sociedad y que, apunta Soler, todavía arrastran "muchos interrogantes". Al libro, también rehace la crónica negra que rodea el pantano, un paraje inhóspito que no ha sido nunca ajeno a los sucesos.

El 24 de agosto del 2017, Marco y Paula, una pareja joven del Maresme, desaparecieron sin dejar rastro al pantano de Susqueda. Entonces, se puso en marcha un dispositivo de investigación para intentar localizarlos. A medida que pasaban los días, los presagios apuntaban cada vez más a un desenlace fatal.

Tres días después, localizaron el kayak que llevaban a la deriva, con evidencias que lo habían intentado hundir expresamente. Y el día siguiente, encontraron su coche, hundido al pantano y también con signos de manipulación. No fue hasta un mes y dos días después de la desaparición que los servicios de emergencias encontraron los cuerpos de los jóvenes. La autopsia confirmó que habían sido asesinados.

El 26 de febrero del 2018, y después de meses de investigación, los Mossos d'Esquadra detuvieron un sospechoso del crimen. Un vecino de Inglés, Jordi Magentí, que ya había estado en prisión para matar la ex mujer en 1997. No hay ninguna prueba directa que lo vincule con el doble crimen de Susqueda pero el conjunto de indicios que apuntan hacia él llevan los investigadores a concluir que es el autor. Magentí estuvo en prisión preventiva hasta el 28 de diciembre del 2018, cuando la Audiencia de Girona lo dejó en libertad. El tribunal veía "debilitados" en los indicios de criminalidad. El caso continúa a instrucción.

Horas y horas de trabajo

La periodista de sucesos e investigación del Punt Avui, Tura Soler, ha invertido horas y horas de trabajo en este caso, recorriendo el pantano, rehaciendo el trayecto que habrían hecho los jóvenes, conociendo las personas que viven alrededor de la presa y estirando el hilo de las pistas que le hacía llegar quién ella denomina su "amigo invisible", un confidente anónimo que no sabe quién es pero que le ha apuntado posibles líneas de investigación.

Todo esto lo ha plasmado, de forma novel·lada, en el libro 'El pantano maldito': "Todo el que aparece es real, no me he permitido ninguna más licencia que recrear algunas conversaciones que aparecen como declaración. El amigo invisible también es real, no es que yo quiera ocultar la identidad".

"Hay casos que son un misterio, que quedan abiertos y que hacen que quieras intentar encontrar la verdad", ha explicado Soler que sostiene que, todo y el esfuerzo, todavía no ha conseguido descubrirla: "Yo no sé qué pasó, pero a veces puede haber aquella pequeña pista que hasta ahora ha pasado desapercibida y que pueda servir para resolverlo". Soler remarca que no hay ninguna prueba científica que "ni siquiera pueda probar que Marc y Paula y Magentí coincidieron al mismo lugar del pantano".

La periodista es un personaje más al libro. Por un lado, explica Soler, porque el punto de vista del narrador omnisciente le permitía "posarse en la piel" de cada persona que aparece, pero también por un punto de "modestia o vergüenza".

Periodismo de sucesos

Un pantano, el de Susqueda, que no es ajeno a la crónica negra. De hecho, el libro de Tura Soler empieza haciendo una aproximación a este paraje inhóspito que ha sido el escenario, más de un golpe, de casos macabros y sorpresivos: una curandera condenada por bruja por la Inquisición que lanzó una maldición antes de morir a la forca, las flores que llevaba un asesino en serie y que se sospecha que podían ser a la tumba de una víctima nunca encontrada o el hombre que metió la pareja dentro de una maleta y la lanzó al agua.

La ninguno de investigación del Punt Avui señala que, a lo largo de su trayectoria profesional, ha tenido que subir en varias ocasiones a Susqueda para cubrir informaciones y también reivindica el papel de los periodistas de sucesos: "Sobre todo nosotros, que hace 30 años no teníamos ninguno otro remedio que ir a los lugares para poder hacer una buena información".

Un periodismo "de picar piedra" que actualmente se está "revalorant" gracias al éxito de programas cómo Crímenes: "El periodismo de sucesos es el que siempre ha hecho verdaderamente periodismo de investigación porque, para sacar un dato, tienes que rascar, trabajar y pedalar. Nosotros hemos tenido siempre muchas más dificultades y ahora se nos está valorando. Bienvenido sea".

Tura Soler reivindica que estas crónicas, al final, acaban retratando la sociedad porque "explicando cómo mata la gente, también estás explicando cómo vive" y reflejando qué son los problemas o las características de cada momento.