El detenido por el doble crimen de Susqueda, en libertad sin fianza

La Audiencia de Girona ha dejado en libertad provisional sin fianza el detenido por el doble crimen de Susqueda. La interlocutoria de la Sección Cuarta estima el recurso interpuesto por la defensa de Jordi Magentí y concluye que "los principales indicios de criminalidad" que había contra él se han visto "seriamente debilitados" a lo largo de estos meses de instrucción. Entre otros, porque no se puede descartar que aquel 24 de agosto del 2017 hubiera otras personas que hubieran podido acceder al pantano sin vehículo ni tampoco teléfono móvil. Por eso, la Audiencia revoca la orden de ingreso a prisión dictada por el juzgado de Santa Coloma de Farners y ordena que Magentí quede en libertad. Eso sí, le retira el pasaporte, le prohíbe marchar al extranjero y lo obliga a presentarse al juzgado cada quince días.

La interlocutoria de la Sección Cuarta, de la cual ha sido poniendo el magistrado Francisco Ortí, ya deja claro de entrada qué es el fondo de la cuestión. De hecho, subraya –literalmente- que dos de las razones para mantener un investigado a prisión son "que haya bastante motivos a la causa para creerlo responsable criminal de un delito" o que haya "indicios racionales" que lo incriminen. En el caso de Jordi Magentí, que trae casi nuevo meses encarcelado como sospechoso de los crímenes de Susqueda, la Audiencia de Girona concluye que los indicios que recoge el auto de prisión dictado por el Juzgado de Instrucción 2 de Santa Coloma de Farners, así como los que esgrime el fiscal, no tienen "suficiente entidad" como para mantener el detenido entre rejas.

A partir de aquí, la interlocutoria los analiza un por ud. De entrada, la Audiencia se fija en el vehículo (un Opel Zafira) con que la pareja del Maresme llegó a Susqueda aquel 24 de agosto. Y dice que, de acá que el coche ensartó el camino de la cantera, no se sabe "en ningún momento" allá donde se dirigieron las víctimas y donde aparcaron "" para hacer kayak. A pesar de que el fiscal sitúa el escenario del crimen a la Rierica, la Audiencia considera que también "sería lógico" que la pareja hubiera aparcado la Opel Zafira cerca de la playa de los Chinos (que es donde el vehículo apareció hundido con una piedra falcada al pedal del acelerador). En concreto, la interlocutoria dice que "no se puede descartar" que las víctimas aparcaran el coche a la pista forestal que trae hasta allá y que, desde arriba, bajaran andando a la playa para poner el kayak al agua y, desde allá, ir hasta la Rierica.