img 20220725120848
img 20220725120848

Redacción / AMIGO

Qué podemos hacer para paliar la inflación

Según un informe de Adecco Group Institute, la ciudadanía ha perdido, cada mes, cuatro euros de poder adquisitivo

patrocini pous
 

Según el informe elaborado por Adecco, el salario mediano en el Estado español es de 1.751 euros mensuales, un 6,6 % más alto que el del año anterior, y máximo histórico. Este hecho, avisan, se tiene que analizar con cautela. El 2020, con la pandemia y el confinamiento domiciliario, llegó a haber más de tres millones de asalariados en situación de ERTO que se consideraban "ocupadas", aunque en rigor el "salario" que percibían (que es, normalmente, el 70 % de su sueldo bruto) era una prestación por desocupación. Así, el efecto ERTO es el que explica los atípicos movimientos de 2020 y 2021.

Sin embargo, esta subida del salario mediano no es real. Para ver el verdadero valor del salario, hay que descontar la variación de los precios al consumo. Tal como menciona el estudio, en el periodo 2017-2019, se produjeron subidas moderadas y, el 2020 hubo un ligero retroceso que dio a un incremento creciente a lo largo del 2021, que continúa también el 2022.

Qué podemos hacer?

Según Pau Cortadas Guasch, profesor de Economía y la Empresa de la UOC, "el problema más grande de la inflación actual es, por un lado, que ha sido causada por factores externos al mismo funcionamiento de la economía y, de la otra, que la situación de incertidumbre actual hace que medidas contractives que podrían ayudar a controlar la inflación no sean efectivas, sino incluso peligrosas"

Para él, "el lockdown vivido y la posterior recuperación con fuerza considerable hizo que la gente se lanzara a consumir. Por la parte de la oferta, factores cómo la carencia de aprovisionamientos hace que no se pueda producir tanto cómo se quiera y, por lo tanto, que aumenten los precios para compensar esta cantidad menor oferta."

De este modo, tanto la inflación cómo la subida del IPC "generan tres grandes problemas: la depreciación del ahorro no remunerado, la pérdida de poder adquisitivo e incertidumbre". "Probablemente, los dos últimos son los que se noten además corto plazo. Está claro que si no existe una actualización de los salarios en relación con el IPC, la subida de precios hace que haya pérdida de poder adquisitivo" explica. "Por otro lado, hay la depreciación del ahorro; tener nuestro dinero sin invertir cuando la inflación es positiva hace que este pierda valor por el simple hecho del paso del tiempo" añade.

Un paso que tiene que dar Europa

Sobre las medidas que habría que aplicar, explica que "la respuesta del Banco Central Europeo y de los gobiernos en general fue de carácter expansivo. Estas medidas son buenas para ayudar a salir de la crisis, pero tienen el hàndicap de ser generadoras de inflación". Así, "el problema es saber en qué momento estamos. Hay muchas señales que nos dicen que no hemos salido del todo de los peligros de una recesión y, por lo tanto, cambiar estas políticas monetarias expansivas por unas restrictivas podrían frenar la reactivación ‟de una economía todavía débil y provocar que cayera definitivamente".

Respecto a las diferencias existentes a nuestra sociedad, tanto a escala individual cómo a los sectores o las diferentes actividades, el profesor Cortadas considera que "una inflación cómo el actual suele afectar todo el mundo, ricos y pobres, pero está claro que los márgenes que tienen unos u otros son diferentes". Por eso, las medidas de la Sido tienen que ir encaminadas a reducir el coste de los bienes básicos y evitar situaciones límites. "Hay que atacar el problema de raíz: el coste de la energía y las primeras materias que tienen efectos expansivos en los precios de todos estos productos."

Comentarios