Capgròs
Los departamentos de Educación y Salud ampliarán a partir de este mismo curso lo programa Salud y Escuela porque cada centro de secundaria del país disponga de un referente de enfermería. El objetivo es promover la salud y el bienestar emocional en el entorno educativo a través de una profesional que atenderá los alumnos con dudas o consultas, y que se encargará de resolverlos o redirigirlos a los servicios que correspondan. El año pasado el programa llegaba al 70 % de institutos, y de cara al curso 2024-2025 se empezará a implementar también en los centros educativos de primaria para llegar a la totalidad de escuelas al cabo de tres años. Representantes de USTEC han recibido los consejeros con un silbido para reclamar un incremento de presupuesto a Educación.
El programa funciona desde el año 2019, con una serie de esos de actuación que se centran en aspectos cómo la salud mental, la sexual, la prevención del consumo de susbtància adictivo se, la promoción de hábitos saludables o la prevención de violencias. El curso pasado el programa se implantaba en un 70 % de los centros de secundaria, con 551 enfermeras repartidas en 771 institutos.
A lo largo de aquel curso, se abrieron unas 18.000 consultas de 10.870 adolescentes, de las cuales un 65 % se pudieron resolver desde el mismo servicio al centro. Estas suelen ser de diferente tipología dependiente de la en torno al centro y del mismo alumno, muchas de las cuales están relacionadas con dudas o aspectos vinculados a identidad sexual, malestar emocional, la relación con los compañeros y el entorno, o malestar del día a día que no tienen herramientas para afrontar.
Ahora, pero, se ampliará el rango de centros para llegar a la totalidad de institutos este mismo curso. "Disponer de una persona referente en el ámbito de salud ayudará a identificar las necesidades que hay y optimizar la coordinación entre los recursos del sistema educativo y de salud", ha destacado la consejera de Educación, Anna Simó, en la presentación del programa al Instituto Numància de Santa Coloma de Gramenet.
El hecho de disponer de un referente de esta tipología permite a los alumnos dirigirse a ella, ya sea de manera voluntaria como través de algún miembro de la comunidad educativa o la familia. "Lo hace con garantías de privacitat, sabemos que es determinante para formar en hábitos saludables", añade Simó.
Atención en los centros
El programa supone que las profesionales de enfermería se desplacen en los centros educativos, dedicando unas 2,5 horas semanales a cada instituto y 4 en caso de zonas de vulnerabilidad o en programas prioritarios. En las atenciones, se hacen visitas individuales a los alumnos a través de la consulta abierta, que se deriva a otros servicios en caso de que sea necesario.
El objetivo es promover la adquisición de hábitos saludables, acompañando el alumno y detectando situaciones de riesgo para evitar que se cronifiquin o deriven en situaciones de más gravedad. "Muchos golpes no se atreven a explicar situaciones que viven a un pediatra o a una enfermera, como por ejemplo bulling, temas de identidad sexual o alteraciones que tienen, y aquí lo explican, decidimos si se tiene que derivar y activar otros recursos, y hacemos un seguimiento hasta su resolución", explica Anna Marchal, enfermera a la región sanitaria metropolitana norte y que atiende jóvenes al Instituto Numància.
Salto a la primaria
El programa no se queda aquí, y el Gobierno trabaja porque a partir del curso 2024-2025 se empiece a implementar también en los centros de primaria de todo el país. "Lo haremos de manera progresiva en tres años para tener una enfermera de referencia a las escuelas", ha apuntado el consejero de Salud, Manel Balcells. De este modo se dará cobertura a toda la comunidad educativa.
El coste de implantación del programa a la totalidad de centros de secundaria es de 15 millones de euros, mientras que a toda la primaria será de unos 12 millones.
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