Empieza la campaña 'El Hospital de Sant Jaume no se toca'

El acto institucional de celebración de los 25 años del Hospital de Mataró, día importante para el Consorcio Sanitario del Maresme, fue el escenario elegido por la Coordinadora en Defensa de la Sanidad Pública para iniciar la movilización contra el anunciado cierre del Antiguo Hospital, el Hospital de Sant Jaume y Santa Magdalena, como centro sociosanitario. Con carteles y camisetas, la Coordinadora da un paso adelante y quiere presionar al Consorcio, al Ayuntamiento y a la Generalitat para que rectifiquen lo anunciado hace una semana.

"El Hospital de Sant Jaume no se toca" y "No a la privatización del sociosanitario" era lo que se podía leer en los carteles de una decena de activistas, colocados al final de la sala que acogía el acto. La Coordinadora coincide con la opinión expresada por los profesionales del Consorcio y por la asociación de facultativos jubilados y no considera válidas las alternativas acordadas para los internos de Sant Jaume, que abandonarán el carrer de l'Hospital en los próximos días.

La Coordinadora exige "garantizar el funcionamiento del actual Hospital de Sant Jaume y Santa Magdalena con las medidas de seguridad necesarias, sin basarse en medidas economicistas durante el período en que no esté construido el nuevo Centro de Cuidados Intermedios, no utilizar otras instalaciones del Hospital de Mataró que desplacen pacientes de otros servicios o cartera de servicios y mantener los puestos de trabajo de los sanitarios".

Críticas en el Ayuntamiento

La Coordinadora recuerda que el Ayuntamiento de Mataró "ha tardado mucho en facilitar los terrenos que debían hacer posible el proyecto del nuevo Hospital de Cuidados Intermedios", que no será una realidad antes del 2027 y en cambio "desde la fecha de cesión de los terrenos hasta la decisión de cerrar el Hospital de Sant Jaume y Santa Magdalena no han pasado ni cuatro meses, ¿qué nos hemos perdido en medio? ¿Qué es lo que no nos quieren trasladar a la sociedad?", se preguntan.

El manifiesto de la entidad que ha catalizado la marea blanca por la sanidad pública bien activa en los últimos meses rechaza de raíz las alternativas al Hospital de Sant Jaume. Respecto al traslado a Barcelona, consideran que "implica la desaparición del modelo de atención integral y personalizado", critican que se quiera ingresar al paciente en un Hospital de Mataró "infrafinanciado, con sobrecarga asistencial y que no dispone de suficientes infraestructuras" y se preguntan por el futuro de los 150 trabajadores del sociosanitario actual.

También, en la línea discursiva habitual de la Coordinadora, vuelven a plantear la falta de transparencia en la decisión tomada sobre Sant Jaume y piden "la creación de organismos de participación ciudadana en todo el sistema sanitario público de Mataró y Maresme".