Terrazas en la calle de Cuba esperando clientes, viernes al atardecer. Foto: V. B.
Terrazas en la calle de Cuba esperando clientes, viernes al atardecer. Foto: V. B.

Primer fin de semana de terrazas en la calle de Cuba

Este viernes y sábado al atardecer y noche los locales han desplegado terrazas en la calle, en una prueba piloto de dinamización del vial

Los restaurantes y pubs de la calle de Cuba de Mataró pueden desplegar los anocheceres de este fin de semana terrazas en medio del vial. Se trata de una prueba piloto que arrancó ayer viernes día 24 al atardecer y que se repite este sábado. Una iniciativa que topa con el rechazo de parte de los vecinos.

Según ha informado el Ayuntamiento a través de carteles de aviso colgados a los portales de la zona, se trata de na "prueba piloto del proyecto común de dinamización de la calle de Cuba". Esto se traduce en la instalación, de 19 a 24h los viernes y sábados de terrazas de pequeño formato en la calle, que está pavimentado a un solo nivel. El objetivo es impulsar la restauración, un sector muy tocado a raíz de las restricciones por la Covid.

Cómo es obvio, esto tiene repercusiones en el tráfico, que queda cortado en los acceso en la calle de Cuba desde la plaza de Cuba o la calle Castaños. Durante la jornada de viernes se generó una cierta confusión entre los conductores que se encontraron con la calle cortada, en especial aquellos que tienen plazas de aparcamiento a la propia calle de Cuba o vials que se entrecruzan como la calle Sant Josep Oriol.

La calle de Cuba se ha convertido en un polo de la restauración a Mataró, como parte de los entornos de la plaza de Cuba, con numerosos restaurantes y pubs. A su vez el vial soporta una importante cantidad de tráfico rodado, motivo por el cual su corte a la circulación tiene afectaciones importantes.

Los vecinos de la calle se han organizado para protestar por la peligrosidad que, según él, tiene este vial, por la elevada velocidad que cogen los coches a pesar de la pavimentación a nivel único o los estacionamientos ilegales a tocar de los portales. A banda, aseguran que el descanso es muy difícil a raíz de la proliferación de los establecimientos de restauración y de las terrazas en patios interiores. Por eso se han mostrado contrarios al hecho que haya terrazas también en la calle.

 

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