El moniato, el tubérculo del otoño
El moniato, el tubérculo del otoño

Ideas para cocinar el moniato

Frito, hervido, al horno o en cremas, durante el invierno es un producto que gusta mucho y que va más allá de la castanyada.

Quizás muchos todavía asocian el moniato con la festividad de Todos Santos. Entonces comemos cocido al horno acompañando las castañas y también los panellets. Pero el moniato mujer mucho más juego, por eso es cada vez más presente a la cocina de los restaurantes. En realidad, también se podría convertir en un alimento indispensable a la despensa de casa. Cuina.cat explica diferentes maneras de incorporarlo a los menús del día a día.

Moniato Frito o saltado

Estamos acostumbrados a comer patatas fritas, pero nos sorprenderemos gratamente si probamos de hacerlo con moniatos. La elaboración es exactamente la misma y los podemos usar de acompañamiento, de plato principal o en un vermut para picar e ir abriendo boca. También podemos probar de saltar el moniato a la plancha cortándolo en finas láminas. Otra opción es convertir la tradicional tortilla de patatas en una tortilla de moniato, siguiendo exactamente los mismos pasos que la receta típica combinándola con un poco de cebolla cortada. Finalmente, otra opción es incorporar el moniato saltado en deliciosos rellenados.

Moniato hervido

Esta sería la opción más sencilla para cocinar el moniato y convertirlo en puré. Su sabor es muy suave y se puede combinar con las verduras que más nos gusten, a pesar de que la calabaza o la zanahoria son dos de las que mejor se adaptan a la dulzura del moniato. Los purés también se pueden usar para preparar platos más elaborados cómo pasteles de carne picada. Para los quienes no sean mucho amantes del puré, el moniato se puede hervir a lonchas y usarlas como capas intercaladas de una lasanya o de una mussaca.

Moniato al horno

Si sois de los que huis de las complicaciones, cocinar los moniatos al horno es la mejor de las opciones. Solo hay que lavarlos bien, envolverlos con papel de aluminio y dejar que entren en calor y que el alta temperatura haga el resto. Otra posibilidad es pelar y cortar a dados el moniato, condimentarlo con un poco de sal y posarlo al horno acompañado de un trozo de carne o pollo para asar. Además del moniato, podéis añadir todas las verduras que quered.

Moniato en cremas

Las cremas pueden ser dulces o saladas y, en este caso, el moniato puede servir como entrante o como postres ideales para el otoño. Como primer plato podéis preparar una crema de moniato con frutos secos, además de caldo de verduras, leche de soja y pasas. También podéis optar para utilizar el moniato a los postres y preparar una crema dulce de moniato, a pesar de que es más calórica por el azúcar y la nata que lleva. Una opción más ligera que el anterior es una crema helada de moniato y canela, con menos azúcares añadidos y con un toque refrescante.

Fuentes: gastronosfera.com y cuina.cat.

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