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J. Vives

Unas 1500 personas asistirán a la beatificación del doctor Samsó

La ceremonia, oficiada por el cardenal arzobispo de Barcelona, es la primera de estas características que se hará en Cataluña en 900 años

Cerca de 1500 personas, entre autoridades religiosas, representantes políticos, agentes sociales, prensa acreditada y espectadores en general. La Basílica de Santa Maria se prepara para acoger este sábado, día 23, la beatificación del doctor Josep Samsó, la primera ceremonia de estas características que se celebra en Cataluña desde el siglo XIII y la primera que recupera la tradición que los beatos se proclamen en su diócesis de origen en ninguna parte de hacerlo al Vaticano, como hasta ahora. El acto, una misa de más de una hora y media que empezará a las once y media del mediodía, estará presidido por el cardenal arzobispo de Barcelona Lluís Martínez Sistach y contará también con la presencia del arzobispo Angelo Amato, prefecte de la Congregación para la causa de los santos, que se encargará de leer el decreto de beatificación. A la ceremonia, además está previsto que esté presente el Nunci del Papa Benet XVI, 16 obispos catalanes entre los cuales el abad de Montserrat, cinco obispos del resto de España y unos 400 curas. Entre las autoridades que ya han confirmado su asistencia hay el presidente de la Generalitat José Montilla y el expresidente Jordi Pujol, así como la secretaria para los asuntos religiosos del gobierno central, el alcalde Joan Antoni Baron, así como varios regidores del consistorio, el presidente y el director general de Caja Laietana y un representante del Tribunal Constitucional, entre otros invitados. La ceremonia se podrá seguir desde la basílica, pero también a través de las pantallas de televisión instaladas a las diferentes capillas así como desde una pantalla gigante que se instalará al exterior de la basílica, donde también se habilitarán unas 500 sillas.

El Papa Benet XVI autorizó el pasado 3 de julio la promulgación del decreto que reconoce su martirio, el paso previo a su beatificación. El doctor Josep Samsó y Elias, sacerdote diocesano y arxiprest de la Basílica de Santa Maria, fue encarcelado y asesinado el 1 de septiembre del año 1936 asesinato "por odio a la fe" durante la persecución religiosa que tuvo lugar en el estado durante la Guerra Civil. Nacido en 1887 en Catellbisbal, Samsó fue vicario de Argentona antes de convertirse en rector de Santa Maria, en 1919. En una carta conjunta, los obispos de la provincia eclesiástica de Barcelona recuerdan que "de manera especial, nos parece que el perdón con el que murió nos pide por siempre jamás y especialmente en las actuales circunstancias de nuestro país, promotores de aquel espíritu de perdón y de reconciliación que siempre ha caracterizado los mejores seguidores de Jesucristo".

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