Capgròs
Un barco de 20 metros de eslora cargado con unos 1.000 litros de combustible se ha hundido a dos millas de la costa de Mataró y ha empezado a rebosar gasóleo. La tripulación del barco, formada tan sólo por dos personas, ha sido rescatada por los equipos de salvamento marítimo de la Guardia Civil y no hay ningún herido debido al suceso. El hundimiento ha tenido lugar este sábado por la noche, entre la costa de Mataró y Puerto Balís, pero el gasóleo se ha empezado a escapar esta madrugada. La mancha de combustible tendría aproximadamente unos 550 metros cuadrados en forma de triángulo, pero el gasóleo se está manteniendo en todo momento lejos de la costa. El barco hundido era una gavarra que transportaba material de construcción desde Barcelona hacia las obras de la dessaladora de Blandas. Por causas que todavía se desconocen, ha naufragado y se ha sumergido a unos 20 metros de profundidad.
El naufragio y la pérdida de combustible han hecho activar el Plan nacional de contaminación marítima, que pone en alerta todos los recursos que tiene en el Estado español el área de Salvamento Marítimo, que depende del Ministerio de Fomento. El remolcador especializado en salvamentos Punta Mayor y dos embarcaciones más, junto con un helicóptero de Salvamento Marítimo, han llegado a la zona este domingo y siguen trabajando por acotar la mancha de combustible y succionarla. Los efectivos desplazados a la costa mataronina también incluyen tres embarcaciones de la Cruz Roja y un equipo de submarinistas, que esta tarde ya han conseguido tapar los tres agujeros del barco por donde sale el combustible. Este mediodía también ha llegado en su punto del accidente el barco Clara de Campoamor, que se encargará de hacer el diagnóstico medioambiental del derramamiento, mientras que mañana por la mañana otra embarcación de salvamento marítimo realizará las tareas de reflotament de la gavarra hundida.
Impacto 'mínimo'
El Delegado del Gobierno español en Cataluña, Joan Rangel, ha asegurado que el impacto ambiental del suceso será "mínimo" puesto que el gasóleo, al contrario que el fuel, "se disuelve en el agua y se evapora". Rangel ha hecho estas declaraciones al Paseo Marítimo de Mataró, en una visita de inspección a la zona del accidente donde ha sido acompañado por el alcalde, Joan Antoni Baron, el regidor de Obras, Servicios y Mantenimiento, Francesc Melero, y la cabeza de Gabinete de la Delegación de Gobierno y exregidor mataroní Esteve Terradas. Rangel ha explicado que los efectivos de Salvamento Marítimo siguen trabajando para "batir el mar y mirar que la mancha no se acerque a la costa", cosa que de momento no está pasando porque la situación meteorológica de este domingo "está ayudante". El Delegado del Gobierno cree que se trata de un "susto" más que no de una situación grave, y ha destacado "la respuesta inmediata de los recursos que tenemos al alcance, que son muy importantes".
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Segundo derramamiento en un mes
La aparición de la mancha de gasóleo de esta madrugada es el segundo derramamiento de hidrocarburo que sufre la costa mataronina en tan sólo un mes. El día 2 de septiembre apareció una mancha de fuel de unos dos kilómetros, fruto de un derramamiento antiguo de origen desconocido. Los equipos de limpieza tuvieron que recoger cerca de un kilo y medio de crudo en forma de galletas de fuel que llegaron a la arena de las playas de a el ciudad, a pesar de que el impacto sobre los bañistas también fue mínimo, ral y cómo ha recordado este mismo domingo el alcalde Baron.
El remolcador Punta Mayor, trabajando a la costa de Mataró
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