La asistencia médica que recibió Jessica, la niña de once años que murió el pasado 12 de octubre cuando estaba de colonias en Cabrera de Mar, 'fue correcta', según un comunicado del Departamento de Salud de la Generalitat. Este recuerda que, sobre las causas de la muerte, es necesario mantener mucha cautela hasta que no se conozca el resultado final de la autopsia.
El Departamento de Salud ha comunicado también a la Fiscalía la apertura de un expediente informativo reservado sobre el caso para determinar las circunstancias de la asistencia que se dio a la niña. Esta pasaba unos días de colonias al albergue Tueste Almendro de Cabrera con compañeros de clase de una escuela del municipio de Arratzu (Vizcaya). Durante las colonias, la niña se encontró mal y fue atendida por la mañana en Montserrat por un médico privado, que no pertenece en la red de asistencia pública. Cómo que seguía sin encontrarse bien, fue trasladada al atardecer al Centro de Asistencia Primaria de Vilassar de Mar, donde un médico de atención continuada la visitó. La niña presentaba vómitos y tos y no tenía fiebre, después de una exploración respiratoria y abdominal, que resultó normal, se le diagnosticó una gastroenteritis viral y se le recomendó dieta y un jarabe.
El día siguiente, el Servicio de Emergencias Médicas recibió una llamada alertando sobre el empeoramiento del estado de la menor y envió hasta tres unidades al centro, que no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
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