Quieren dinamizar el comercio del centro.
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Quieren dinamizar el comercio del centro.

Un multirreincidente con problemas mentales desespera al comercio de Mataró

Un chico con problemas psicológicos ha hecho de los hurtos con intimidación su modus vivendi y acumula numerosas detenciones por parte de los Mossos d'Esquadra

En medio del debate público sobre el problema de la multirreincidencia, en Mataró hay una sola persona que acumula decenas de intervenciones policiales y procedimientos judiciales, que presenta problemas de salud mental y que ha hecho del hurto con intimidación en diferentes comercios su modus vivendi. Lo conocen los comerciantes, lo conoce la Policía y también lo conoce la jueza que podría decretar su eventual ingreso en algún centro médico. Pero semana tras semana se repite la situación: selecciona negocios regentados por mujeres, entra y comete robos con total impunidad.

Negoci Empresa Mataró lo denunció, a través de su tesorero Carles Reganya, quien explica que "vemos que cada vez acumula más casos, que la jueza no lo envía a ningún centro y que la policía nos dice que no puede hacer nada. Cada vez se siente más valiente e ingresa con intimidación en comercios, sobre todo si ve que despachan mujeres. Hace un año y medio que sufrimos esta misma persona, que se dedica a entrar en negocios y cometer hurtos. Lo hace con una tranquilidad de quien se siente fuerte: entra, roba y sale", relata también el comerciante durante el desayuno del NEM con la prensa.

Por parte de los Mossos d'Esquadra, el perfil y su forma de actuar son ampliamente conocidos. La Policía de la Generalitat explica que es un problema más de gestión sociosanitaria que policial, pero reconoce que ha tenido que intervenir muchas veces cuando causa molestias. Esta persona, que sistemáticamente comete hurtos, es detenida y llevada ante la justicia, pero no es ingresada, como su estado de salud requeriría.

"Lo único que podemos hacer los comerciantes es poner denuncias, pero cuando esto ocurre durante un año y medio, se han presentado denuncias, hay informes, hay juicios y no se quiere ingresarlo, se genera una situación peligrosa: él siente que tiene impunidad y el comerciante queda desamparado", explica Reganya.

Los cuerpos policiales, según indican desde NEM, conocen a todos los perfiles similares a este: personas generalmente jóvenes que acumulan en algún caso decenas de denuncias al año.

NEM presentó el caso de este joven en el marco de una comparecencia muy crítica con la situación de seguridad en la capital del Maresme.

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