Entornos de la estación de Mataró, donde fue detenido el joven. Foto: R. G.
Entornos de la estación de Mataró, donde fue detenido el joven. Foto: R. G.

Detenido un joven de 19 años para intentar agredir un policía local en la Estación de Mataró

El detenido forma parte de un grupo conflictivo de jóvenes que se dedican a hurtos y robos a los entornos de la estación que y han hecho crecer la inseguridad en este sector

La Policía Local de Mataró detuvo ayer martes, día 16, un joven de 19 años que intentó agredir uno de los agentes que participaba en tareas de vigilancia preventiva a la Estación de Cercanías. A los entornos de este edificio se ha producido un aumento de la inseguridad en las últimas semanas, algo que ha llegado a comportar la creación de patrullas vecinales.

Los hechos tuvieron lugar hacia las 7 de la tarde en el marco de un servicio de vigilancia que la Policía Local lleva a cabo a la estación después de las quejas ciudadanas sobre la carencia de seguridad a la zona. Los policías hicieron una identificación preventiva a un grupo de jóvenes reunir en el entorno del paso subterráneo que conecta la plaza Miquel Biada con la Estación.

Uno de los jóvenes se negó a identificarse y, según explican fuentes municipales, reaccionó de manera violenta, con la intención de agredir uno de los agentes del dispositivo. Por este motivo, el chico, de tan sólo 19 años, fue detenido por atentado a la autoridad.

Los entornos de la estación han vivido un repunte de hechos delictivos, como por ejemplo hurtos y robos que sufren los usuarios de Cercanías, en especial al atardecer y noche. Este hecho ha llegado a motivar que un grupo de ciudadanos haz vigilancia alrededor del edificio, una iniciativa de un grupo de padres preocupados por la seguridad de sus hijos cuando vuelven a Mataró de estudiar a otros municipios. Cercanías también aumentó la dotación de seguridad privada, y la Policía Local también está haciendo vigilancia preventiva de cara a mejorar la percepción de seguridad.

Fuentes policiales destacan que los problemas de seguridad están ocasionados habitualmente por un grupo de jóvenes de entre 15 y 25 años, entre los cuales habría jóvenes extutelats y residentes extracomunitarios sin domicilio fijo, que se dedican a los hurtos y a los robos con violencia, como por ejemplo estribadas o empujones. Cuando la policía local hace vigilancia en la zona, los jóvenes se desplazan a otros puntos de la ciudad, como por ejemplo el centro o el barrio de Rocafonda. En este barrio los vecinos protestan porel aumento de la inseguridad protagonizado por perfiles similares.

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