Capgròs
Todos los elementos de Las Santas, con la versión condicionada de este año, se dividen en dos grupos: los que se pueden reinventar y los que no hay manera de hacerse. A la lista de los salvado, con peso propio, hay los castells.
La actividad castellera en forma de actuaciones está tajada de pura cepa por motivos obvios desde el inicio de la pandemia pero esto no ha sido impedimento porque los Capgrossos de Mataró hayan hecho una aparición simbólica, justamente hoy.
El domingo antes del 27 es cuando se escau la fiesta castellera de Las Santas. En ausencia de esta convocatoria, la pandilla ha tenido su momento de reivindicación simbólica un golpe ha acabado la Muestra de Bailes de las comparsas, en el segundo pase del mediodía y sobre el entablado de la Plaza del Ayuntamiento. Los azules han levantado tres pilares, con cada uno de ellos circunscrito a los grupos burbuja que se hicieron para recuperar los ensayos hace semanas. Tres pilares que han gustado y emocionado al público, que restaba bajo un sol de justicia al final de todo el ritual de la Dormida.
La estampa de los pilares, con las figuras de fondos, es una de las imágenes destacadas de la jornada.
El pilar de la Mariona
Antes, a las once y media, los Capgrossos también han querido protagonizar otro momento más íntimo a nivel de pandilla y habitual cada año antes de la fiesta. Desde el 2007, justo un año después de la trágica muerte de Mariona Galindo Lora, los de moratón homenajean a la joven castellera con un pilar a Santa Maria. Este año no hay fiesta pero no ha faltado este pilar, seguido de una larga ovación de recuerdo a la Mariona. Su familia nunca falla. No hay castillos pero no se pierde la memoria.
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