Pere González: 'Ha llegado la hora de dar el relevo a los jóvenes'

- Usted deja la dirección este año después de casi treinta años...

- Sí, empecé en 1978 y pliego este año porque creo que en Mataró hay varias personas capaces de dirigir la Misa de las Santas y que en un momento u otro se tiene que plegar. Hace años que los maestros Tuesta y Arenas nos dieron el relevo a en Josep Canals y a mí y ha llegado la hora que yo dé el relevo a los más jóvenes, porque prefiero que la gente me recuerde de este modo que soy ahora que no de aquí a cuatro años, que tendré 71 y no sé como puede ir. En caso de emergencia, pero, yo estoy dispuesto a hacer el que sea.

- Con su adiós empieza un cambio generacional...

- Exactamente, ahora dentro de la rueda de maestras quedan en Lluís Carné, en Josep Canals y en Francesc Cortés. Supongo que ahora se seguirá la rueda y de aquí a cuatro años, según el que decida la administración de Las Santas, se puede escoger otro director.

- Qué toques ha querido dar a la Misa de este año?

- Yo generalmente pienso que esta misa se tiene que hacer operísticamente, es decir, un poco ligera. Las arias y las piezas que cantan los solistas tienen que ser cómo aries de ópera y el corazón tiene que sonar como un corazón de escenario. E intento traerla de este modo. Musicalmente es una pieza con un valor importante. Cuando padre Manuel Blanch la compuso el 1848, era la época de máxima expansión de la música italiana y tenía influencias como Rossini. La misa tiene un carácter bastante propio de su época: de liturgia no tiene demasiado. Y creo que traerla litúrgicamente sería un error, se tiene que traer operísticamente.

- Qué novedades hay en la edición de este año?

- La novedad más importante es que el solista tenor, Josep Ruiz, interpretará una plegaria después de la comunión. Él hacía tiempo que lo quería hacer, lo pedimos a la junta de la administración de Las Santas y dijeron que adelante. Es una cosa especial, que este año se hará por primera vez. Y la pieza es muy bonita, se llama Andaré y habla de Dios y de la Virgen.

- Cree que los mataronins dan suficiente importancia a la Misa de padre Blanch?

- Yo creo que sí, porque la basílica cada año se llena a tope y viene gente de todo Cataluña a escucharla. Es una misa que hace más de 150 años que se interpreta, que me parece que debe de ser un caso único al mundo, con más de 150 cantaires al corazón, cuarenta músicos a la orquesta y cinco solistas. Es una cosa importantísima que tenemos que hacer que dure por siempre jamás.

- Y afuera de Mataró es suficiente conocida?

- El año 1978, precisamente, con motivo del 75è aniversario del Orfeón Mataroní la cantamos al Palau de la Música, pero está claro, sin un permiso, sólo se puede interpretar el 27 de julio en Mataró.

- Qué futuro le ve?

- La misa no está en peligro ni mucho menos. Beethoven, por ejemplo, es del siglo XVIII y todavía ahora se toca música de Beethoven y esta misa puede pasar igual: algunos fragmentos se han tocado en conciertos. Pero la misa es, sobre todo, tradición. Padre Blanch la escribió expresamente por este día.