Judith Vives

Palau y Fabre reivindica la figura de Ismael Smith

La fundación Palau inaugura este viernes una muestra con la obra de este desconocido artista catalán

“Esta exposición quiere tener un carácter reivindicativo de una figura que tampoco es un genio, como él mismo se pensaba, pero que tampoco se merecía ser olvidado del todo cómo ha pasado durante 60 años en Cataluña”. Así definió ayer Josep Palau y Fabre la exposición que a partir de este viernes día 11 y hasta el 30 de octubre se podrá ver a la Fundación con sede en Caldes de Estrac que trae su nombre, y que está dedicada al artista catalán Ismael Smith.

Dos expertos sobre la obra de Ismael Smith y principales coleccionistas de su obra, Artur Ramon y Enrique García-Herraiz, fueron los encargados de presentar ayer a los medios de comunicación la figura de este artista que parece “destinado a ser redescubierto continuament”, según afirmó Garcia Herraiz, máximo especialista en la vida y obra de este artista desconocido. También explicó como había descubierto, en ochenta, la obra de Ismael Smith, después de conocer a su hermano Paco, ingresado en un hospital del mismo municipio de los Estados Unidos, Irvington, donde García Herraiz trabajaba como responsable de la oficina de turismo.

Artur Ramon, coleccionista y presidente de la asociación de antiquaris de Barcelona, destacó Ismael Smith como un “artista clave para entender nuestra cultura visual”, puesto que estuvo ligado al novecentismo y al modernismo. Aún así, Ramon también explicó la vinculación del artista con varias corrientes estéticas de la época. “Por mí, Smith tiene el gran valor del artista, y es que consiguió ser portavoz de su tiempo y catalizador de todas las corrientes artísticas”.

Josep Palau y Fabre, que se añadió tarde a la presentación por motivos de salud, explicó de donde proviene su fascinación por la figura y la obra de Ismael Smith. “Yo sentía hablar a en Mompou y a mi padre de pequeño, y después su nombre desapareció del todo, hasta que un día en García Herraiz me enseñó unas cosas de Ismael Smith. Entonces vi que aquel nombre, que era mítico de cuando yo era niño, existía”, relató. García Herraiz aprovechó la presencia de Palacio para hacerle obsequio de un pequeño dibujo realizado por Ismael Smith en el que representó el rostro de Dios. El dibujo entrará a formar parte del fondo de la Fundación según avanzó el propio Palau.

Un artista polifacético
Ismael Smith nació en Barcelona en 1886 en Barcelona y fue reconocido por Eugeni de Ors cómo uno de los principales artistas del "novecentismo" catalán por sus contribuciones innovadoras en el arte de inicios de siglo. El año 1911, gracias a una beca marcha a estudiar en París durante cuatro años. En la capital francesa se dejó influenciar por todas las vanguardias artísticas del momento, desde el expresionismo alemán hasta el futurismo italiano. Esta influencia se deja ver tanto en sus esculturas como en las ilustraciones, cerámicas y joyas que realizó.

A la década de los años 20, Smith se instaló en Nueva York, donde trabajó como grabador y escultor y adquirió un cierto renombre como exlibrista. De esta época datan también muchos de los dibujos, muchos de los cuales pintó para si mismo, por lo cual fueron desconocidos durante mucho tiempo. Afectado de una enfermedad mental, Smith estuvo ingresado en un psiquiátrico durante doce años, hasta el momento de su muerte.

A la exposición que se inaugura hoy se pueden ver un total de ochenta obras entre las cuales hay un aceite, catorce grabados, treinta ocho dibujos, once esculturas, dos joyas, dos cerámicas y diferentes exlibris. La muestra se completa con un retrato de Ismael Smith realizado por Ramon Casas. De estas piezas, tres forman parte del fondo de la Fundación Palau y el resto han sido cedidas por varios coleccionistas entre los cuales destacan Artur Ramon y Enrique García Herraiz.

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