Todos los secretos de Can Xalant

Poner a disposición de los artistas un amplio espacio para realizar proyectos de arte contemporáneo, realizar intercambios con diferentes centros culturales y ofrecer un amplio abanico de recursos multimedia. Estas son algunas de las propuestas que los encargados de la gestión de Can Xalant, Tránsito Proyectas y la Asociación Cultura Contemporánea de Mataró (ACM), empezarán a ofrecer a partir del mes de marzo del año próximo.

De hecho, el proyecto de Can Xalant está concebido con el objetivo de incentivar este tipo de arte y convertirse en una iniciativa pionera en todo el Estado. El centro, situado al Plan de en Boet –calle Francesc Layret, 75- y ubicado en una antigua masía del siglo XVI, dispone de salas y espacios para llevar a cabo varias iniciativas, siempre bajo la “mirada” del arte contemporáneo.

Can Xalant estará dirigido a todos aquellos aristes artistas con “ganas de impulsar un proyecto de arte contemporáneo” y que no “disponen de todos los recursos para llevarlo a cabo”, según ha explicado el director del centro, Pep Dardanyà. Los proyectos que podrán hacer uso del centro se seleccionarán conjuntamente entre el director y el Consejo de Dirección, formado por tres miembros de Tránsito Proyectes, tres de ACM y una persona independiente –en este caso, será el comisario Italiano, Roberto Pinto-. Por Dardanyà, la calidad primarà sobre otros criterios: “Los proyectos locales y comarcales tendrán prioridad. No queremos caer en el ‘localismo' ni en el ‘provincianismo', es decir, los proyectos de fuera o de casa no son por si sólo mejores”.

En cuanto a los proyectos, en concreto Tránsito y ACM han diseñado cinco propuestas, además de ofrecer varios servicios públicos como un centro de documentación.

Proyecte Laboratorio. Pondrá en disposición de los artistas tres salas para alquilar –de entre 30 y 40m2-, a un precio inferior a mercado, y una amplia oferta de servicios multimedia. En total, habrá un taller de edición de vídeo, un taller de postproducción y un taller de edición y grabación de audio. “La intención es que se preparen unos espacios por la producción de arte contemporáneo con unas condiciones que faciliten su desarrollo”, ha explicado, Pep Dardanyà, quien ha resaltado la gran calidad tecnológica de los aparatos que se instal•laran.

Residencias e intercambios. Un sector del edificio de Can Xalant se ha habilitado para acoger un residente que necesite el espacio para dedicarse a fondo en su proyecto y también con la intención de intercambiar artistas de diversa procedencia. De hecho, según ha avanzado su director, esta habitación ya tiene previsto dos inquilinos a mitades del 2006. Se trata de un artista de la ciudad de Medellín, Colombia, y de un canadiense, el cual vivirá cuatro meses a Can Xalant, y que proviene del centro de arte Fonery de Montreal. Según Dardanyà, este proyecto se ha diseñado porque “hay que aprovechar las sinèrgies de los estudiantes extranjeros y maximizar la experiencia adquirida”.

Utilidad y difusión. El Proyecto Curatorial impulsará medidas para que las creaciones y producciones de los artistas residentes tengan una utilidad por el propio centro. En este sentido, ya ha previsto un proyecto por la construcción de una carpa que se situará en el patio del edificio y que servirá para impulsar proyectos en época veraniega. Por otro lado, la difusión de las creaciones será también uno de los ejes básicos de Can Xalant. El centro prevé mantener estrechadas vinculaciones con otros espacios de arte y firmar convenios con las escuelas porque puedan visitar in situ la elaboración de los proyectos. Además, se prevé crear una publicación periódica que muestre los proyectos llevados a cabo.