"Mataró va bien"

Fue un domingo de verano y medio Mataró estaba en la playa. Aún así unos doscientos vecinos se pusieron la visera del PSC, se armaron con un clavel y fueron a sentir el mitin central de campaña. Dos cerdanyolins, Remigi Herrero y Consuelo Prados, fueron los encargados de hacer de taloners. El primero, que está de retirada, habló apasionadamente de Mas "su antojo ha sido Mataró", dijo. Después el alcalde y candidato del PSC le volvió los cumplimientos y destacó sus años de gestión provocando la primera ovación de la mañana. Prados, un valor en alza dentro del partido, también recibió los requiebros del alcalde, que elogió su trabajo en el Plan Integral de Rocafonda y la señaló como promotora de un modelo de convivencia que sirve de ejemplo a otras ciudades. Poniendo a prueba los decibelios de los altavoces, el candidato del PSC empezó haciendo un repaso de la gestión del gobierno que resumió con un "Mataró va bien", al mes puro estilo aznarià. El alcaldable se adjudicó los méritos del paseo marítimo "que fue una acuerdo con el gobierno del PSOE" y no rehuyó hablar de zonas azules: "si no hay posibilidad de salir adelante, echamos atrás", dijo al respeto. Después repasó algunas prioridades del programa: "Los socialistas paramos la orea y prestamos atención", afirmó Mas haciendo os de un bilinguisme excesivo. Al final del discurso el alcaldable llamó los eslóganes de su campaña y encendió el himno, pero tuvo que volver a coger la palabra para dar el turno Pasqual Maragall, a quien se había dejado de anunciar. El presidenciable subió con ojeras de sol por desesperación de su equipo de campaña y va improvitzar un discurso repitiendo en varias ocasiones la eslogan de ERC "Este año sí". Al final subieron todos los regidores para hacer la foto de familia. Arcadi Vilert corrió mucho, pero no llegó a tiempo en la foto.