Capgròs
La mediación es una herramienta muy útil para que diferentes partes enfrentadas en un conflicto puedan resolverlo y llegar a un acuerdo sin necesidad de recurrir a la justicia. El Ayuntamiento de Mataró quiere poner esto de manifiesto, señalando que durante el año 2023 más de 1,250 casos se resolvieron a través de esta vía.
El consistorio mataronense cuenta con el servicio de Mediación Ciudadana, al que se suman la mediación aplicada por departamentos como el Servicio de Vivienda o la Oficina Municipal de Atención al Consumidor. Entre todos, han gestionado un total de 1,254 casos mediante esta vía, la mayoría de los cuales están vinculados a problemas entre propietarios de viviendas y sus inquilinos, con el objetivo de evitar la pérdida del hogar. Pero también hay cientos de casos relacionados, por un lado, con conflictos vecinales, familiares o en el ámbito educativo, entre otros; y por otro lado, con problemas entre consumidores y empresas proveedoras de productos y servicios.
Conflictos en materia de vivienda
Un total de 475 expedientes se han gestionado mediante técnicas de intermediación desde el Servicio de Vivienda. En concreto, se ha intermediado con grandes y pequeños propietarios para que lleguen a acuerdos con los residentes en sus pisos, evitando opciones radicales como el desalojo o la pérdida del hogar. En el caso de grandes propietarios, se cuenta con dos abogados mediadores de la Diputación de Barcelona, mientras que con los propietarios particulares es un mediador del consistorio quien se encarga.
Problemas entre vecinos
En cuanto al Servicio de Mediación Ciudadana, durante el 2023 ha atendido 368 casos, beneficiando a un total de 1,651 personas de manera directa y 4,404 de forma indirecta (entendido como repercusión de la acción mediadora en el entorno del conflicto abierto). 236 casos (65%) se refieren a las relaciones vecinales, mientras que el resto de tipologías se centran en conflictos familiares, en el ámbito escolar o en el espacio público.
Reclamaciones a empresas
La tercera rama en el ámbito mediador es la de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), que intermedia entre ciudadanos que han tenido un problema con un producto o servicio y la empresa proveedora. Si la persona consumidora ha presentado una reclamación previa a la compañía y esta no ha respondido en 30 días, o lo ha hecho insatisfactoriamente, la OMIC inicia un proceso de mediación o arbitraje.
Durante el 2023, la OMIC ha trabajado en 411 procedimientos de esta naturaleza. Los sectores más reclamados son los suministros básicos de telefonía, gas, electricidad; seguros; servicios financieros; transportes; garantías de productos; alquileres y compras de viviendas; reformas del hogar y reparaciones de vehículos; limpieza de textiles y prestaciones de servicios odontológicos y estéticos.
Un servicio gratuito
Desde el consistorio destacan que la mediación es un servicio gratuito que garantiza la confidencialidad y favorece la participación desde la voluntariedad. El proceso de mediación fomenta el acercamiento, la comprensión y el diálogo, haciendo posible que las personas lleguen por sí mismas a acuerdos satisfactorios y duraderos.
Comentarios (1)