Capgròs
Cerca de 400 personas se manifestaron ayer sábado día 20 al atardecer por las calles de Mataró en contra de la sentencia de prisión al rapero Pablo Hasél. La manifestación, la segunda que tiene lugar en la capital del Maresme esta semana por el mismo motivo, transcurrió sin ningún incidente y de forma pacífica, al contrario del que se ha vivido estos últimos días en otras ciudades como por ejemplo Barcelona.
La concentración se inició a las 19h en la plaza Isla Cristina de Mataró, donde los convocantes leyeron un manifiesto que, tal y cómo está pasando en el conjunto de manifestaciones de estos días, demostró que el encarcelamiento del rapero leridano es tan sólo la punta del iceberg de las protestas. Además de clamar contra la carencia de libertad de expresión al Estado que se ha hecho patentiza con la sentencia condenatoria a Hasél , los manifestantes, la mayoría jóvenes, exigieron que se cumplieran otros muchos derechos básicos.
"Violencia es que los jóvenes no vean ningún futuro, violencia es que tres de cada diez niños del país vivan en situación de pobreza, o no ser aceptado por tu género u origen, o el trato que estamos dando a las personas de la tercera edad, Violencia es perder la casa y quedarse a la calle", decía el manifiesto inicial. La precariedad laboral, el feixisime y el racismo los desahucios o la violencia policial son cuestiones que están impulsando miles de personas en todo el país a manifestarse estos días.
Precisamente las actuaciones policiales de estas últimas jornadas, que han generado una oleada de críticas incluso desde el propio gobierno de la Generalitat, motivó que la marcha se dirigiera desde Cerdanyola hasta el Plan de en Boet, donde hay la comisaría de los Mossos d'Esquadra. Esta estaba fuertemente custodiada por una veintena de agentes antidisturbios, pero no se produjo ningún incidente, al contrario del que pasó hace unos días a la comisaría de Vic que fue asaltada violentamente. Más allá de algunos clamores contra la violencia policial, la manifestación siguió pacíficamente.
La columna de manifestantes continuó hasta la estación de Cercanías, siguiendo la avenida Maresme, y desde allá se dirigió al centro de la ciudad para finalizar, hacia las 20.30h, ante el Ayuntamiento, hasta disolverse sin haber generado ninguna incidencia. En cambio, durante la misma jornada de ayer sábado los Mozos detuvieron 34 personas en Barcelona, Tarragona y Lleida por hechos derivados de las protestas, como por ejemplo desórdenes públicos y actas de pillaje (saqueos de tiendas o lanzamiento de piedras al Palau de la Música, entre otros. De nuevo se vivieron operaciones de la BRIMO muy polémicas como por ejemplo el cercamiento de unos manifestantes al barrio de Gràcia de Barcelona, que acabó con heridos.
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