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Los Mozos descartan ninguna negligencia en el accidente mortal del joven mataroní

Edgar Valldeperas fue enterrado sábado después de un funeral multitudinario

El accidente que el pasado jueves día 10 le costó la vida al joven mataroní Edgar Valldeperas no se debió a una negligencia de los responsables de la pista de esquí de la Molina. Los Mossos d'Esquadra descartan esta posibilidad después de haber reconstruit los hechos y de haber comprobado que la red de seguridad contra la que este joven de 16 años topó se encontraba en condiciones.

Fuentes de los Mossos d'Esquadra de Lleida han explicado que actualmente no existe ninguna legislación que detalle como tienen que ser los elementos de seguridad de las pistas de esquí. Según la policía autonómica, el accidente se produjo porque el joven, que esquiaba en una pista roja (de alta dificultad), topó contra la barra de hierro que sujeta la red de protección. A consecuencia del impacto se produjo heridas internas que le causaron la muerte.

Los Mossos d'Esquadra, que se han basado en una inspección ocular y en el testigo de algunos compañeros del joven, consideran que no se produjo ninguna negligencia por parte de la pista de esquí y han dado la investigación por cerrada. Aún así, será el titular del juzgado de Puigcerdá el que determinará si los responsables de la Molina tienen alguna responsabilidad en este accidente.

El pasado viernes, día 11, responsables de la estación de esquí emitieron un comunicado en que lamentaban la muerte de Edgar Valldeperas y ofrecían toda la información necesaria para que se esclarezcan los hechos. Los responsables de la estación manifiestan igualmente que su prioridad es garantizar "la seguridad de todos sus usuarios y del personal que trabaja, así como de cualquier visitante".

Edgar Valldeperas fue enterrado el pasado sábado día 12 después de un multitudinario funeral que duró una hora y cuarto y que llenó la basílica de Santa Maria. Un día antes, el viernes 11, fue el club baloncesto Valldemia, donde Edgard jugaba con el equipo júnior, que le rindió un homenaje. En concreto, se hizo un minuto de silencio en un acto que tuvo lugar a la pista polideportiva de la escuela y reunió cerca de 1.500 personas. En el centro de la pista se colocaron tres objetos relacionados con la figura de la Edgard: un libro de matemáticas, una pelota de baloncesto y la camiseta con el número 8 que lucía el chico dentro del equipo.

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