Joan Salicrú

Los cuatro directores del Centro Santo Pau recuerdan la evolución de la entidad

La asociación, pionera en el estado español a la hora de acoger africanos, celebra estos días su vigésimo aniversario

Una sexagésima de personas se dieron cita ayer a Can Palacete para celebrar el acto de cariz más institucional del vigésimo aniversario del Centro Santo Pau. Acompañados del alcalde, Joan Antoni Baron, estuvieron los cuatro directores que hasta ahora ha tenido el Centro: padre Ignasi Marqués, Quim Pons, Juanjo Bertran y Ferran Moreno, los cuales relataron la evolución que ha ido sufriendo el Centro a lo largo de los años.

El primero a intervenir fue padre Marqués, que fundó el Centro el 1984, cuando era rector de la parroquia de Santo Simó y Santo Pau ante la llegada de los primeros "negros del Maresme". Marqués recordó durante su intervención como los vecinos del barrio lo denominaban "el cura de los negros", en motivo de su dedicación al centro, que entonces se denominaba Centro de acogida de africanos Santo Pau.

Marqués recordó como los inicios no fueron fáciles y que la iniciativa disfrutó antes del reconocimiento de la prensa extranjera -The New York Times habló el 1987- que no de la nacional y local -La Vanguardia habló el 1988 y la prensa local el año siguiente, recordó en tono de queja-. Así mismo, el exresponsable del centro explicó que fue primero el Gobierno Central quién dio financiación a la entidad y posteriormente la Generalitat y el Ayuntamiento: "No éramos precisamente populares y todavía me recuerdo del día que tuve que borrar una pintada que decía 'Negros go hombre'", explicó.

Después de él, el jesuita Quim Pons, que le tomó el relevo el 1994, explicó la segunda etapa del Centro, cuando pasó a depender directamente de Càritas Diocesana. En aquel momento empezó a hacerse evidente que el Centro no podía ser de acogida sólo de africanos, porque ya había tantos o más magrebíes. Pons le quiso dar la vuelta al proyecto: "Vimos que también teníamos que acoger la gente necesitada del barrio, de forma que fuera un centro de integración real. Y que teníamos que salir a la calle y tener dimensión pública".

Al acabar, tomó la palabra Juanjo Bertran, director desde el año 2000 hasta el 2002. "En este periodo empezamos a hacer las primeras clases de catalán y a tener como profesores algunos inmigrantes, así como crear un casal de verano y resolver problemas puntuales de vivienda de jóvenes que llegaban con muchos problemas", recordó. Por último, Salvador Obiols, director adjunto de Càritas Diocesana, clamó porque en Cataluña no haya otros catalanes. "Nos tenemos que integrado todos, los unos con los otros", dijo. El exrector, ante el cual sentaba el actual responsable de la parroquia, padre Vicenç Mira, valoró especialmente el hecho que la acogida a los africanos era tanto por parte de personas creyentes como no creyentes.

Archivado en:

Comentarios