Lligadas: 'La manifestación rompe la transversalidad de los cristianos'

El teólogo Josep Lligadas aseguró ayer sábado día 18 en Mataró que la presencia de la jerarquía eclestiàstica española a la manifestactió celebrada en Madrid en contra de la ley que posibilita a los homosexuales que se casen -y que contaba con el apoyo del Partido Popular- supone la rotura de la transversalidad política de los cristianos: "Es lo más grave que le ha pasado en la Iglesia española desde la muerte de Franco", apuntó. Lligadas, que en su etapa como cura había sido rector a Maria Auxiliadora de Mataró, participaba en la 22a edición de la Cena-Debate que anualmente organizan varios colectivos católicos progresistas de la ciudad, como Acción Católica Obrera, Justicia y Pau, Cristianismo Siglo XXI y el Grupo Tercero Mundo-Mataró. El acto, que traía por título Soy cristiano: y qué? se celebró al casal de la parroquia de Sant Josep y contó con la presencia de 95 personas.

Lligadas animó los presentes a seguirse definiendo como cristianos a pesar de los posicionamientos de la jerarquía que puedan incomodar los crisitans de base. "Somos Iglesia y nadie nos puede decir que nuestra manera de serlo es equivocada. No es verdad", comentó. El excapellà diferenció entre los conceptos propios de la fe -más generales- y los que se incluyen dentro del Magisterio de la Iglesia -que se va produciendo a medida que la historia avanza-.

Finalmente, el teólogo apuntó varias recetas para transmitir la fe en el mundo de hoy entre las cuales destacó rehuir el gueto cristiano y compartir todo el que se pueda con personas que se manifiesten no creyentes: "Yo creo que Jesucristo es la verdad absoluta, pero no creo que los que no lo piensen se equivoquen", dijo. Lligadas habló también de recordar el ingente número de propuestas espirituales que hay al mercado actual, practicar una forma de vida austera, trabajar porque los cristianos vivan la fe de una manera abierta, explicar en el mundo que hay otras maneras de ser cristiano más allá de los posicionamientos oficiales de la Iglesia, reforzar la propia fe tan cómo se pueda y formarse en el sentido más clásico.