Capgròs
El modelo de ciudad dibujado por el gobierno municipal a la memoria que acompañaba el ya retirado Programa de Actuación Urbanística de Mataró (PAUM) y que define la estrategia urbana por los cercanos catorce años traerá Mataró a convertirse en una ciudad dormitorio. Así lo denunciaron los representantes de los partidos de la oposición (CiU y PP) y de los partidos sin presencia al consistorio (CUP y AvdM) que intervinieron, junto con los representantes de los tres partidos gobernantes (PSC-ICV y ERC), en un debate político que tuvo lugar el pasado viernes a la sala de actas de Caja Laietana. El acto, organizado por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mataró (FAVM), traía el título de El futuro urbanístico de Mataró: la ciudad que queremos.
El portavoz de CiU, Joaquim Esperalba, remarcó que el nuevo modelo territorial de la ciudad se tiene que basar en la convivencia y los intereses de los ciudadanos y que tiene que afrontar dos nuevas realidades: el envejecimiento de la población y la inmigración, fenomens que desequilibran las ciudades. Esperalba mostró su preocupación por la posibilidad que se puedan crear ghettos de inmigrantes a los barrios y reclamó una política de reequilibrament de estos barrios por parte del Gobierno, así como una política de rehabilitación y alquiler a toda la ciudad para evitar un crecimiento urbanístico desmesurado y la transformación en una ciudad dormitorio: Últimamente sólo se construyen viviendas y el que hacen falta son más equipamientos y servicios públicos, dijo.
En la misma línea se expresó el PP: "queremos una ciudad que sea una verdadera capital, un punto de referencia con la capacidad de atraer inversores y muy comunicada: no la ciudad dormitorio dil·luïda dentro del área metropolitana que prevé la nueva estrategia urbana", expresó el portavoz del grupo municipal popular, Paulí Mojedano.
Los partidos sin representación municipal también se mostraron críticos con el proyecto urbanístico del gobierno. El tripartito nos quiere vender una nueva estrategia urbana que hipoteca nuestro futuro y da lugar a la especulación, especialmente la de PUMSA: de aquí a diez años Mataró será una ciudad dormitorio de 150.000 habitantes con unos barrios degradados, el suelo urbanizable agotado, nuevas viviendas que los ciudadanos no podrán pagar y habrán empeorado los problemas de movilidad y recogida de residuos que ya tenemos ahora, señaló Carme Polvillo, representando de la CUP, en una de las intervenciones más contundentes del debate.
Por su parte, Antonio Ruiz, ninguno de lista de la Alternativa Vecinal de Mataró, denunció que la reciente política urbanística del Gobierno está comportando la desaparición de la industria local a favor de la construcción de nuevas viviendas. En este sentido, Arcadi Vilert, regidor de Urbanismo y representante del PSC al debate, explicó que la intención del Gobierno es precisamente reciclar los suelos que dejan entregues algunas fábricas, estructuras obsoletas que la sociedad no demanda.
Una ordenación vigente
Los representantes de los partidos de Gobierno, Arcadi Vilert (PSC), Jaume Graupera (ICV-EuiA) y Toni Civit (ERC), coincidieron al señalar que la ordenación del territorio municipal en los sectores forestal, agrícola y residencial prevista al Plan General de Urbanización de 1996 sigue todavía vigente y, junto con el resto de debatents, destacaron la necesidad de potenciar la fachada marítima de la ciudad. Graupera, además, defendió el proyecto de desarrollo urbanístico de la ciudad afirmando que responde a la aspiración de la felicidad de los ciudadanos, que reivindican una mejor vivienda. La gente tiene derecho a venir a vivir en Mataró, dijo. Civit, por su parte, explicó que, dentro de la nueva estrategia urbana, el tripartito pretende que se construyan hasta un 30% de viviendas de protección oficial y fortalecer el crecimiento cualitativo de la ciudad que es, según afirmó, "el que preocupa los mataronins".
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