J.V.

El PAUM queda sin efecto

El tripartito municipal aprobó la suspenció de su tramitación en medio de las críticas de la oposición

El pleno municipal aprobó ayer al atardecer, con los votos en contra del PP y la abstención de CIU, dejar sin efectos la tramitación del Plan de Actuación Urbanístico Municipal (PAUM) que se había aprobado inicialmente al pleno de julio. El regidor de Urbanismo, Arcadi Vilert, explicó que con la modificación de la nueva ley de Urbanismo este instrumento ya no es necesario para garantizar la reserva del 20% -30% en Mataró- de vivienda de protección oficial a los nuevos sectores de desarrollo urbanístico y recordó que en el momento de iniciar su tramitación ya se advirtió que este giro se podía dar. Vilert también recordó que la memoria que acompaña el PAUM, que recoge los futuro sectores de desarrollo de la ciudad, pasará a debatirse en el seno del Pacto por el desarrollo económico y social.

Aún así, la votación de este punto de la orden del día generó un largo debate en el que no faltaron las críticas de los grupos de la oposición. El regidor de CiU Antoni Valls fue el primero al atacar afirmando que la suspenció del PAUM resultaba una “burla” a los colectivos como la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mataró, que se habían interesado por su contenido y con quien el alcalde se había comprometido a iniciar un proceso de debate que tenía que incluir la celebración de dos audiencias públicas. “Estos colectivos han querido expresar e introducir sus ideas al PAUM y ahora queda sin efecto. Se dijo que todo se paraba y ahora se vuelve a poner todo en marcha, como los proyectos de Iveco-Pegaso y la Ringlera”, dijo Valls. “No se ha logrado el consenso ciudadano y ahora sólo se consolidarán las ideas preconcebidas del gobierno”, añadió. El regidor nacionalista recordó que CiU había votado a favor en la aprobación inicial del PAUM y anunció la abstención en esta votación.

En términos similares se expresó el PP por boca de Joan López, a quien se pudo volver a sentir después de bastantes meses sin ninguna intervención al pleno. López, que tal y como recordó Vilert ha sido uno de los ponentes de la ley de Urbanismo, comenzó su intervención criticando el proceso que ha seguido el gobierno municipal en la tramitación del PAUM: “empezó como un pan con tomate, enmedio hubieron quejas y protestos y mientras se debatía, se iban echando cosas adelante”, afirmó en referencia a las modificaciones del Plan General que durante este tiempo se han hecho de ámbitos como Ronda Barceló o la Ringlera. López también aseguró que el gobierno se aprovecha del cambio en la ley de Urbanismo para aparcar el debate urbanístico alrededor del PAUM. “Ahora se los ha aparecido la virgen y cómo que la ley dice que no hace falta lo PAUM, ya pueden coger el debate en el que se habían empantanegat y enterrarlo”, dijo.

El regidor popular fue muy crítico también con el documento que justifica los motivos por el cual se suspende el PAUM y en el que también se recogen algunos compromisos del gobierno, como el de mantener el mínimo del 30% de reserva de suelo para la vivienda de protección oficial, la voluntad de integrar el debate urbanístico en el Pacto por el desarrollo económico y social y la intención de recoger en un único documento los proyectos de desarrollo de la fachada marítima. “La mayoría de nuevas viviendas que se construirán estarán a la fachada marítima, pero esto es una contradicción con el proyecto de traslado de la vía del tren, ya queaquesta zona quedará aislada”, advirtió López, que también se interesó, entre otros proyectos urbanísticos de la ciudad, sobre la reurbanización de la Calle Biada y Ronda Barceló un golpe se ha anunciado que el Corte Inglès no se instalará en este sector.

En su réplica, Arcadi Vilert reiteró la voluntad del gobierno municipal de esperar hasta finales de febrero, tal y cómo se acordó con la FAVM, antes de salir adelante los proyectos urbanísticos, con la intención de debatirlos. El regidor de Urbanismo, además, defendió la memoria adjunta al PAUM, un documento que según recordó ha sido debatido con más de 500 personas y que incorpora también los puntos de vista de los socios minoritarios del gobierno.

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