Cabanelles reabre (de momento cinco domingos)

El nudo gordiano de la Llar Cabanelles, uno de los espacios más emblemáticos de Mataró y a la vez uno de los asuntos urbanísticos que más se arrastran en el tiempo, parece que empieza a desembullar-se. Este domingo, 20 de febrero, 100 personas que ya han agotado las entradas disponibles. Serán los primeros mataronins que entrarán en esta inmensa finca de 14.500 metros cuadrados situada al balcó inferior de Rocafonda, a la ronda de Alfons X El Sabio. En las últimas dos décadas, prácticamente, tan solo algunas grabaciones de series y películas han tenido el privilegio de traspasar la puerta, disfrutar del espacio y entrar al vetusto hogar, del 1874, una romanalla arquitectónica de primer orden, catalogada patrimonialmente.

El Hogar Cabanelles reabre, sí, pero lo hace de manera mínima. Para la ocasión y un domingo al mes. Para ofrecer visitas teatralitzades al conjunto, para posibilitar el regreso en el espacio de antigua gente que estuviera o el descubrimiento de quien siempre se lo ha mirado de fuera la cierra estante. En homenaje a las personas voluntarias que lo han velado todo este tiempo y, también, con la esperanza que el nudo siga resolviéndose y la ocasión histórica de estas 'Matinales a Cabanelles' que se programarán sea la antesala de la resolución del futuro del espacio. El asunto Cabanelles empieza el deshielo y hay optimismo porque se desencalle en breve.

Hace más de 22 años que el equipamiento protegido y la finca, en un espacio estratégico, permanecen cerrados

Una patata caliente

Es aconsejable toda la precaución con el futuro en lo referente a Cabanelles , una finca con un hogar del 1874 que acogió durante décadas las Germanetes de los Pobres y que posteriormente fue un centro sociosanitario público. El espacio es una herencia de la indiano Antoni Martí Cabanellas "por los pobres de Mataró" y la evolución del equipamiento y su titularidad ha sido una de las patatas calientes de la ciudad las últimas décadas.

Ha habido tres proyectos diferentes, convenios firmados entre la Fundación que la tenía e incluso maquetas presentadas (con un Carles Mantiene que acabaría entre rejas de gran promotor) que han acabado en nada. La propiedad, con el rector de Santa Maria (único albacea original, al ser un cargo siempre ostentado) de pieza clave ha mantenido el espacio, rechazado ofertas de todo tipo y finalmente el 2019 la cedió a Càritas Diocesana de Barcelona. La nueva propietaria, ahora, ha autorizado estas 'Matinales a Cabanelles' como primer gesto

"Hay ganas de pisar el Hogar Cabanelles, hay una demanda de reencontrarse con este espacio", explican desde La Nave de Cabanelles. Pero, qué es 'La Nave de Cabanelles' y que tiene que ver con el Hogar Cabanelles? Este domingo, 20 de febrero, será el primero de cinco (20 de marzo, 24 de abril, 15 de mayo y 19 de junio) en qué treurà la cabecita esta 'Nave' que es el paraguas que acoge a cuatro entidades de la ciudad que se alían para abrir y dinamizar Cabanelles, siempre con el permiso del Ayuntamiento y de la propietaria, Càritas Diocesana.

La Nave son la AVV de Rocafonda, Càritas Interparroquial de Mataró, Cronopis y la compañía EnDramats. Los cuatro actores han concertado la programación de estas jornadas especiales, con visitas teatralitzades en el interior del Hogar que son de pago (a beneficio de la compañía que las interpreta) y tastets culturales y sociales posteriores, ya abiertos, al exterior. La fal·lera para ver por dentro Cabanelles se ejemplifica en el hecho que las 100 entradas de las visitas de este primer domingo ya se agotaron hace días. Realmente hay ganas de Cabanelles.

Entidades de Rocafonda y Circo

"Cada domingo de mes habrá actividades diversas, con el objetivo que sean inclusivas y representativas del barrio y su vida", explican. Por este primer domingo, habrá un festival de entidades del barrio y espectáculo de circo con 'Circo Carpa Decimos'.

Cuando este domingo se abren las puertas del Hogar Cabanelles y los más rápidos al comprar entradas entren a los diferentes aposentos del edificio de 1874, el que verán los puede dejar astorats. Las habitaciones, las salas, la Capilla. Todo el conjunto es precioso. Gracias a Càritas Diocesana, Renacuajo ha podido entrar a Cabanelles y constatar que el edificio nota el paso del tiempo y el desuso, sí, pero también se mantiene con buen estado de conservación. Durante todos estos años, diferentes personas (y un servicio de vigilancia nocturna y alarmas) han velado para evitar la degradación de un conjunto catalogado. Gracias a esto todavía hay Hogar pero también es evidente que para posarse en funcionamiento de nuevo, cuando sea, hará falta una rehabilitación importante. Bastante más que un lavado de cara. La inversión no será menor.

Desde la Nave valoran poder abrir puntualmente Cabanelles cómo una oportunidad que mucha gente vuelva o la conozca, que comprueben el estado del edificio y también como reconocimiento y homenaje a la gente que de forma altruista lo ha mantenido.

Cuando el 2016 la Fundación Cabanelles (antigua propietaria) y el Ayuntamiento de Mataró negociaban el futuro de la nave, se calculó alrededor de los 2 millones la inversión necesaria. A día de hoy, entrar al antiguo asilo de los pobres es cómo un viaje en el tiempo y tan solo los pequeños hurtos de instalaciones denotan que ha habido algún intruso no deseado todo este tiempo. Las visitas teatralitzades del grupo EnDramats, surgido del aula de Teatro del Ayuntamiento, serán ejercicios de relato histórico del que fue el Hogar.

Hace 6 años, el Ayuntamiento de Mataró calculaba que destinarla a usos sociales podría costar 2 millones

El proyecto fallado de convertirla en centro de salud mental

Durante la década pasada se quiso convertir la isla del Hogar Cabanelles en un gran centro de atención psiquiátrica con un hospital con 70 plazas, una residencia asistida, un centro de rehabilitación comunitaria, viviendas dotacionals, un aparcamiento y un gran parque abierto a la ciudad. Se presentó oficialmente en 2010, con unos costes previstos de como mínimo 22 millones de euros. El presupuesto, pero, no estaba garantizado y la crisis hizo que el proyecto quedara guardado en un cajón. Por sus dimensiones y ubicación, la isla del Hogar Cabanelles siempre será una pieza urbanísticamente golosa, pero sus condiciones -cualificada como equipamiento religioso asistencial y con el legado testamentari que obliga a destinarla a una función social- limitan mucho las posibilidades.

Qué se hará al Hogar Cabanelles? La pregunta del millón todavía no tiene respuesta, pero casi todas las partes y fuentes coinciden que podría tener pronto. Definir qué será en el futuro el edificio y todo su contorno es el primer paso, cuando podrá ser ya sería toda otra partida. Cabanelles cambió de manso el 2019 y desde entonces la clave la tiene Càritas Diocesana de Barcelona.

De esta entidad, la más potente del tercer sector, depende el proyecto futuro del espacio. De Càritas, pero también de un Ayuntamiento de Mataró que es un actor clave y también, incluso, de la Comisión Europea. Uno de los posibles elementos que pueda densecallar el futuro de este epsai que lleva más de dos décadas cerrado es si el proyecto que impulse la propiedad cuenta con bendición para aspirar a fondo europeos. Y en este escenario es normal pensar en los Next Generation.

Sobre el Hogar Cabanelles todavía no hay un proyecto definido. Esto es todo el que dice una Càritas Diocesana que mantiene lo mutes en espera de poder redondear una propuesta en firme. Fuentes de la entidad que el 2019 recibió Cabanelles de manso de la Fundación homónima remiten al respecto al legado testamentari original como máxima concreción del que se hará.

"No hay nada en firme, solo el compromiso de dar continuidad al espíritu fundacional. No hay ningún ánimo de esconder nada, pero la ciudadanía merece un respeto y cuando se cierre un proyecto informaremos", resuelven desde Càritas Diocesana a Renacuajo.

El Ayuntamiento quiere que sea un espacio verde abierto

Càritas Diocesana no dice ni mu pero consta la fluidez de las negociaciones y contactos con el Ayuntamiento de Mataró. Lo confirma la regidora de Bienestar Social Laura Seijo: "Cabanelles tiene que ser un equipamiento de ciudad, abierto y con un cariz social. Nosotros trabajamos con Càritas Diocesana porque se desencalle ya. Estamos en conversas más intensas desde hace un año y colaboraremos", explica. Cuando puede llegar este proyecto descrito? No se sabe muy bien, pero es la propia Seijo quién remite a los fondos Next Generations de reconstrucción europea cómo una posible vía de financiación para el futuro Hogar Cabanelles, sea qué siqui.

Desde el Ayuntamiento se tendrá papel en toda la operación porque, avanza la propia regidora "hará falta una intervención urbanística en la que estamos muy interesados, no solo por el centro asistencial sino que queremos que quede abierto, que sea un espacio verde, un emplazamiento de ciudad importante".

El efecto de la Covid

Cuándo Càritas Diocesana recibió Cabanelles, el proyecto que barrenaba era lo de un equipamiento potente, de envergadura. No estaba definido el eje principal pero podía ir desde un ámbito más residencial de gente mayor a una rama más de formación juvenil de personas que abandonan los estudios o incluso de asistencia infantil escolar y cultural. Una de las personas claves en los primeros meses de propiedad de la entidad del Obispado de Barcelona fue el obispo auxiliar Antoni Vadell, que el pasado sábado murió joven, por cáncer. El otro elemento que se tiene que tener en cuenta es el efecto de la Covid-19. El impacto que ha tenido en los servicios que presta Càritas Diocesana es muy importante y ha retrasado en el tiempo y en las prioridades el que todo el mundo espera: la solución de futuro se supone que definitiva, del Hogar Cabanelles de Mataró.