portada opinió Vadell
portada opinió Vadell

La educación, motor de transformación

El regidor de educación del Ayuntamiento de Mataró defiende la oportunidad histórica del traspaso y reorientación del Instituto Miquel Biada

Si nos paramos en cualquier momento de la historia del pasado (o del presente) y nos fijamos en cualquier proceso de transformación de una ciudad, veremos que todos estos cambios tienen, de una manera u otra, un mismo origen: la educación, una de las palancas de la evolución más importantes y sin la cual nos sería difícil avanzar socialmente, personalmente, económicamente... La educación es, sin duda, el eje vertebrador de la transformación.

Es evidente que la apuesta por la educación, por la cultura, por los conocimientos, por las habilidades sociales e interpersonales son fundamentales para hacernos crecer como personas y como sociedad. Sin base cultural es difícil crecer individualmente. Sin base cultural es difícil poder nutrirnos el alma. Dejadme ilustrarlo solo con un ejemplo. Si visitamos el museo Reina Sofía seguro que podremos disfrutar de la magnificència del Gernika, de Pablo Picasso, pero podremos fruir mucho más si somos capaces de entender el momento histórico que representa, los bombardeos que vivió la ciudad vasca por parte de la aviación alemana e italiana durante la guerra civil español, o podremos coger la simbología o iconografía del lienzo.

La educación nos hace crecer individualmente. Y, por supuesto, nos hace crecer colectivamente. Ningún cambio importante y significativo a nivel global se ha producido sin un debate intelectual detrás.

En nuestra ciudad se nos presenta un cambio que puede ser importante a nivel educativo. El Instituto Miquel Biada tiene la posibilidad de integrarse a la Generalitat de Cataluña. Esta integración es una oportunidad, entre otros, para continuar apostando, impulsando y aumentando la Formación Profesional (FP) en nuestra ciudad. Porque el FP tiene un excelente prestigio a nivel europeo, porque estos estudios postobligatoris más especializados permiten la continuidad de la formación en función de las motivaciones del alumnado y porque permite tener un acceso más directo a un mundo laboral donde la tasa de paro juvenil es de un 45 % a Cataluña (hay que matizar, emperò, que el 60 % de los titulados, según las estadísticas, encuentra trabajo antes de los nuevo meses).

Es por todos estos motivos que las personas que nos dedicamos a la enseñanza tenemos una responsabilidad añadida, un compromiso con cada uno de nuestros alumnos... Nuestra tarea comporta una gran responsabilidad... Bendita tarea, eso sí, una de los mejores trabajos del mundo: la de acompañar, la de mostrar, la de enseñar, la de generar dudas, la de dar herramientas...

Esta oportunidad es la que nos ofrece la Formación Profesional y a todos nos gustaría hacerla crecer y que Mataró se convirtiera en un referente en este tipo de enseñanza. Estoy convencido que el Sr. Miquel Biada y Buñuelo no se perdonaría perder este tren...

Archivado en:

Comentarios (5)