Calle Rosselló, eje comercial sujeto a las transformaciones de Cerdanyola

El barrio de Cerdanyola, uno de los más grandes de Mataró, es a nivel comercial uno de los centros más dinámicos de la ciudad. Y dentro del centro comercial de Cerdanyola, destaca históricamente la calle Rosselló como el eje que concentra una gran parte de las tiendas del barrio. El comercio de Cerdanyola y de la calle Rosselló en concreto ha sido tradicionalmente, por definición, comercio de proximidad, configurado por pequeñas tenderos de tipos familiares, muy enfocadas a un tipo de cliente del mismo barrio, donde destaca el trato personalizado y el tendero "de toda la vida". Tiendas como Civit, de productos de droguería, perfumería y pinturas, la joyería Garcia o la tienda de ropa Massana se pueden explicar la historia de la calle y del barrio, puesto que en algunos casos hace más de 40 y 50 años que están instal•lades a la calle Rosselló  ha vivido de primera mano los cambios que se ha ido produciendo.  Cambios que han sido marcados, desde siempre, por los movimientos migratorios, tanto el de la inmigración española de los años 60 como el de la llegada de nuevos ciudadanos de países extracomunitarios de los últimos años.

La propia configuración del barrio, con un tercio de su población de origen extranjero, ha hecho que en los últimos años el perfil del comercio a la zona se haya ido transformando. Algunas de las tiendas de siempre han ido cerrando para dar a nuevos establecimientos regentados por ciudadanos recién llegados procedentes de la China, del Marruecos o del Pakistán. Así, a las joyerías, droguerías, tiendas de ropa, fincas y otros comercios, se ha sumado bares, supermercados, fruiteries, carnicerías, locutorios y otras tiendas donde se pueden encontrar tenderos y productos llegados de nuevos lugares. También la clientela habitual ha ido cambiando en función de los movimientos migratorios que definen el barrio. 
 
Pero disparo de algunas de las tiendas históricas que continúan al pie del cañón, la realidad hoy es que las tiendas abren y cierran con bastante celeridad. Esto se debe de en parte al perfil de una parte de los comerciantes que hoy regentan tiendas a la calle Rosselló, sometidos a mucha movilidad y cambios. Pero también a la situación económica que afecta al comercio como tantos otros ámbitos. Una partes de los tenderos continúan asociados a la Unión de Tenderos para mirar de llevar a cabo acciones de dinamización comerciales como por ejemplo jornadas de tiendas a la calle y ferias al aire libre que permitan dar a conocer comercios y productos a los vecinos.