T.Rodon /E. Castarnado

Una solución de última hora permite en Arenys celebrar el pasacalle de macips

El acto es lo más destacado de la Fiesta de Santo Roc y estuvo en peligro por discrepancias entre el Patronato de la fiesta y un colectivo alternativo

Finalmente, Arenys de Mar pudo disfrutar, ayer martes, día 16, del tradicional voto de villa, la fiesta celebrada en honor a Santo Roc y que cada año saca en la calle un centenar de macips, macipets y captadoras que rocian con agua bendecida los habitantes del pueblo. El pasacalle de macips es, de hecho, el principal acto de la Fiesta de Santo Roc –la fiesta mayor pequeña de Arenys de Mar- y este año ha estado a punto de no celebrarse debido a las discrepancias surgidas entre el Patronato de Santo Roc y el Colectivo Alternativa Flor de Espino.

Unas discrepancias, pero, que venían de lejos. La tradición explica que los chicos tienen que ser los encargados de hacer de macips, es decir, de rociar a la gente del pueblo con agua de colonia. Por otro lado, la tradición también dicta que el papel de las chicas de la villa –captadoras- se limita a recoger dinero entre las casas que los diferentes grupos visitan. Hace tres años que un grupo de jóvenes de Arenys no sale por Santo Roc para pedir que chicos y chicas tengan el mismo papel dentro de la fiesta o, cuando menos, la posibilidad de escoger la tarea a realizar. El hielo se rompió el pasado mes de abril cuando integrantes del Colectivo Kafa emitieron un comunicado pidiendo apoyo para organizar un pasacalle de macips, al margen del Patronato, y donde las chicas pudieran traer la almorratxa –recipiente mediante el cual los macips rocian a la gente del pueblo-. Su llamamiento obtuvo respuesta cuando a finales de julio una septuagésima de personas –chicos y chicas- se añadieron a los conocidos como macips “alternativos”.

A pesar de todo, a principios de agosto, el Patronato de Santo Roc anunció que los macips no saldrían el principal día de la fiesta mayor pequeña. “Nunca nos hemos mostrado contrarios a que las chicas puedan traer almorratxes. Hemos tomado la decisión porque sin diálogo entre las dos partes no podemos garantizar una buena fiesta”, decía el comunicado, que mostraba como el malentendido trascendía hacia discrepancias persones.

Sin el beneplácito del Patronato, la fiesta corría el riesgo de acabar en un enfrentamiento entre las dos partes. Así lo vieron los diferentes grupos políticos presentes al consistorio que mantuvieron varias reuniones para llegar a una solución conjunta. A pesar de todo, la oferta final del ayuntamiento que se ofrecía de mitjancer en el conflicto, fue desestimada por las dos partes.

La solución, pero, llegó ‘in extremis'. El pasado domingo, día 14, el Patronato y el colectivo anunciaron una entente “por el bien de la fiesta y para no privar a la población de una celebración que es de todos”, según coincidieron. Con todo, el pasacalle de macips –habrá que ver si con el tiempo también se denomina de “macipes”- se desarrolló con total normalidad y con casi nula presencia de captadoras.

Como una balsa de aceite
Finalmente, el pasacalle se realizó ayer sin ningún conflicto y los más de noventa macips y macipes que participaron salieron como una unidad, lejos de las discrepancias que habían mantenido la pandilla del Patronato y el colectivo Alternativa Flor de Espino. "Ha sido difícil ponernos de acuerdo en muchos aspectos pero finalmente hemos salido todos a una y no ha habido ningún problema", ha dicho hoy uno de los macips de Arenys de Mar, Ricard Torrentó. Los únicos problemas que hubieron fueron de cariz "logístico", según ha explicado Torrentó: "Hicimos corto con la colonia pero todo va ser un tema de organización interna". El éxito de esta edición hace pensar a los organizadores que el año que viene, los macips y macipes arenyencs se pondrán de acuerdo desde un buen principio.

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