Los Mozos alertan de la oleada de robos de relojes de lujo

Los Mossos d'Esquadra buscan dos motoristas por haber cometido, al menos, catorce robos de relojes de lujo que sustraen, preferentemente a turistas, violentamente por el que una de sus víctimas, Enric B.P., de 64 años murió el pasado martes al hospital de Barcelona después de sufrir graves lesiones. Según que ha informado la policía autonómica, los robos se han cometido en el Maresme, a la costa de Barcelona, y los autores son dos jóvenes de raza blanca que viajan en una moto de gran cilindrada.

La última de sus víctimas, Enric B.P., de 64 años, murió el pasado martes a consecuencia de las graves lesiones que sufrió a la cabeza cuando, dos días antes, estos delincuentes lo asaltaron bruscamente y lo echaron en tierra a la avenida de la República Dominicana de Pineda de Mar para robarle un reloj marca Rolex.

Fuentes de la policía autonómica han informado que los dos presuntos delincuentes actúan siempre de la misma forma y que cometen sus robos en apenas un minuto, con el único objetivo de sustraer un reloj de marca. Los ladrones escogen primero su víctima, una persona fácil de atacar, bien para ser grande o estar suela, y que acostumbra a ser un turista con un alto poder adquisitivo que luce un Rolex o Breitling en uno de sus muñecas.

A continuación, los delincuentes esperan el momento adecuado para perpetrar el robo -cuando la víctima transita por un lugar más o menos apartado- y en cuestión de según lo abordan con la moto, lanzándola bruscamente en tierra y arrebatándole el reloj, justo antes de emprender la fuga a toda velocidad.

Los motoristas, que actúan siempre con el casco puesto, sólo roban relojes de lujo y no se llevan la cartera ni cabe otro objeto de valor, el que hace pensar a los investigadores que previamente los delincuentes ya tienen emparaulat con un tercero la salida de estas pequeñas joyas.

Desde comienzo de año, los Mossos d'Esquadra han recibido catorce denuncias por este tipo de robos, aunque la muerte de Enric B.P., el pasado martes, ha provocado que la policía autonómica haya decidido extremar la vigilancia con el fin de detener los dos delincuentes.