"Las becas comedor no distinguen el origen de los alumnos"

El otorgamiento de becas comedor es un tema que ha generado debate y controversia en las últimas semanas a Mataró y al Maresme. La protesta de un grupo de familias en situación irregular a quien se los había denegado la ayuda ha derivado en una polémica muy subida de tono sobre el derecho de los hijos de padres sin papeles a ser adjudicatarios de la beca. Desde el Consejo Comarcal, ente que gestiona la tramitación, lo tienen muy claro. "Son menores de edad, estudiantes del sistema educativo catalán y sin ninguna culpa ni responsabilidad de la situación administrativa de sus familias, y tienen los mismos derechos que los alumnos de padres o madres nacidos aquí", constatan.

"Es una falsa polémica que perjudica los alumnos", afirman desde el Consejo Comarcal

Marco Bosch, Consejero delegado de Servicios a las Personas del Consejo Comarcal, es muy rotundo a la hora de responder a la polémica generada. "Por nosotros no hay alumnos inmigrantes o no inmigrantes, las bases de otorgamiento de las ayudas no mencionen este hecho en ningún momento ni se tiene en cuenta a la hora de dar luz verde o denegarlas". Bosch lamenta esta "falsa polémica" que "perjudica a los alumnos", y recuerda que las beques comedor se libran según un criterio de valoración socioeconómica de la familia, según unos baremos de ingresos, sin que otros criterios entren en cuenta.

No obstante, es cierto que las familias sin DNI o NIE pueden encontrarse con más problemas a la hora de recibir la beca. "Se nos presenta la dificultad que los datos de su situación económica, que nos presentan no las podemos comprobar a través de hacienda, cómo hacemos con todos los casos, puesto que las familias en situación irregular no constan", explica Bosch. Cómo que no se pueden acreditar los ingresos (es la Generalitat quién cruza los datos con Hacienda), la ayuda es denegada automáticamente a no ser que la familia cuente con un informe de vulnerabilidad expedido por los Servicios Sociales de cada municipio. El proceso para obtenerlo, pero, puede ser complicado burocráticamente, tal y cómo han denunciado varias familias a Mataró coordinadas por el Sindicato de la Vivienda.

Se ampliarán los criterios porque servicios sociales puedan expedir más informes de vulnerabilidad a las familias sin NIE

"De cara al año que viene ampliaremos los criterios porque los servicios sociales municipales puedan expedir informes de vulnerabilidad a estas familias", explica el responsable de Servicios a las Personas del Consejo Comarcal. Los departamentos municipales podrán tener en cuenta factores como por ejemplo los problemas habitacionals de las familias (sobreocupació de la vivienda, amenazas de desahucio, incapacitado de hacer frente al pago de suministras básicos). A banda, se empoderarà las direcciones de los centros educativos donde estudian los alumnos para facilitar en Servicios Sociales datos y observaciones de las situaciones de riesgo de estos alumnos. Con todo ello, se facilitará que las familias sin papeles en situación de riesgo socioeconómico puedan contar con el informe de vulnerabilidad imprescindible porque puedan optar a las beques comedor, y que el factor Hacienda no sea tan determinante.

Este curso se ha marcado un récord de solicitudes, con más de 10.700 al Maresme

En este curso 2021-2022, un total de 160 alumnos de familias en situación irregular han recibido beca comedor, mientras que a 202 se los ha denegado, precisamente para no contar con el citado informe de servicios sociales, a pesar de que la convocatoria se mantiene abierta si desde estos departamentos municipales se detectan situaciones de riesgo. Durante este curso se ha registrado un récord de peticiones de estas ayudas al Maresme, con 10.774 solicitudes, de las cuales se han otorgado, hasta ahora, 8.923. "Es preocupante que tantas familias necesiten este apoyo", explican desde el Consejo Comarcal, desde donde recuerdan que si bien el comedor escolar se plantea de origen cómo un recurso educativo para conciliar la vida familiar y profesional, para muchos ciudadanos es hoy un recurso para la manutención de los hijos que suple las carencias económicas familiares.

El proceso para solicitar las ayudas

Las beques comedor están gestionadas por el Consejo Comarcal en base a los baremos establecidos por el departamento de Educación de la Generalitat, a pesar de que a la hora de solicitarlas, las familias se tienen que dirigir a los ayuntamientos correspondientes. Las ayudas se otorgan para el 70 % o bien para el 100 % de la manutención, según cada caso (el precio del menú diario es de 6.33 euros). El periodo de solicitud suele abrirse a la primavera y finaliza el 30 de junio. En los últimos años la tramitación se ha agilizado y se ha conseguido que las becas estén otorgadas antes del inicio de curso. La transferencia económica se hace directamente en las escuelas, que gestionan el pago con la empresa de comedor que tengan contratada.