Aumentan los recursos de seguridad y calidad a las playas maresmenques

Las medidas de seguridad y accesibilidad a las playas del Maresme han incrementado de cara la nueva temporada de playas. La Diputación de Barcelona ha invertido más de 1.093.515 euros para mejorar el servicio en las playas del área de la provincia de Barcelona. En total, en el Maresme se han habilitado 19 torres y 23 sillas de vigilancia, 24 lugares de socorros, 23 embarcaciones, 12 vehícles, 1 moto acuática y 23 sillas de ruedas especiales por el baño de personas discapacitadas.

A pesar de todo este dispositivo, en la presentación de la campaña de playas 2004, que ha tenido lugar esta mañana en Sant Pol de Mar, la diputada del área de Salud Pública y Consumo de la Diputación de Barcelona, ha querido dejar claro que la última responsabilidad es la del ciudadano: “independientemente de los recursos invertidos tenemos que incentivar a los ciudadanos el uso de medidas responsables a la playa, por lo tanto, tienen que tener presente y respetar las señales y las recomendaciones que los hagan los vigilantes”.

Este año la Diputacióde Barcelona ha querido hacer un especial énfasis en la accesibilidad al agua de las personas con problemas de movilitat, por lo cual ha incrementado el número de sillas de ruedas. También ha mejorado la seguridad. En este aspecto ha confeccionado 12.000 pulseres infantiles para facilitar la identificación de los niños desorientados y ha incrementado la zona de costa especial para bañistas, la cual está delimitada con balices y prohibida a embarcaciones o a la práctica de deportes acuáticos.

En el caso de la playa de Mataró, donde la campaña de seguridad se inicia el 15 de junio, se dispondrá de dos torres y tres sillas de vigilancia -algunas de las cuales han tenido que ser cambiadas de lugar debido a las obras de construcción del Paseo Marítimo-; un lugar de socorro, tres embarcaciones, un vehícle, una silla de ruedas y un equipo humano de dieciocho personas. Estos dispositivos, comparados con los del resto de poblaciones, han sido calificados “de óptimos” por los responsables de Cruz Roja de Mataró.