Capgròs
Un hombre ha aceptado este martes 15 meses de prisión y 1.620 euros de multa por haber difundido un vídeo de una agresión y violación a la Xina y acusando falsamente un menor migrante suele marroquí de Canet de Mar. El 2019, el acusado, guardia civil, publicó el vídeo a Twitter y aseguró que los hechos habían pasado a Canet. La fiscalía pedía inicialmente dos años de prisión, pero las partes han acordado rebajar la prisión, a cambio que el acusado cierre los perfiles, no delinca durante 15 meses y no trabaje en ningún trabajo docente, deportiva o de ocio durante más de seis años. La fiscalía ha pedido que siga un curso de igualdad de trato y no discriminación. Es una de las primeras sentencias por 'fake news' contra menores migrantes solo.
Según ha aceptado el acusado, J.J.M.F. la vista oral a la Audiencia de Barcelona, "movido por su animadversión y rechazo a los inmigrantes extranjeros de origen marroquí" y sobre todo los menores no acompañados, publicó el tuit en las 22.24 horas del 1 de julio. Una denuncia de la Generalitat a través de la DGAIA a la fiscalía, llevó los Mossos d'Esquadra a identificar el autor del mensaje, que fue retuitejat 19 golpes, tuvo 13 aprobaciones y generó al menos 93 comentarios. El vídeo fue visto más de 21.900 golpes.
En el texto se afirmaba: "Aquí tenéis el vídeo del DIRIGE marroquí de Canet de Mar, a estos a quien lo daremos la pagueta hasta los 23 años" y "Para más INRI, la viola, estos energúmens y estas mandadas de marroquíes no saldrán a los medios". En el vídeo se ve como un hombre agrede brutalmente una mujer, dándole 15 puñetazos al cabo, seguidos de siete puntapiés también al cabo. La mujer acaba inconsciente en tierra. A continuación le intenta bajar los pantalones y lo estira de los cabellos arrastrándola por tierra hasta que salen del campo de visión de la cámara de seguridad que ha grabado toda la escena. El vídeo fue grabado el 22 de junio del 2019 y fue difundido por las autoridades chinas para pedir la colaboración ciudadana en la identificación del autor.
"Difamar de forma global e injusta"
Según el ministerio público, con la difusión del vídeo, el acusado "pretendía, con manifiesto desprecio a la verdad y de forma masiva e indiscriminada entre todos los potenciales usuarios de Twitter, asociar el contenido del vídeo con una presunta violación ocurrida a Canet de Mar al parecer por dos menores de edad el 29 de junio del 2019". Esto lo hacía con el fin de "difamar de forma global e injusta" los menores migrantes solo y especialmente los marroquíes, "asociándolos de forma generalizada con actos violentos y agresiones sexuales, desacreditándolos con esto y contribuyendo de este modo a despertar o aumentar entre la población los prejuicios y estereotipos contra este colectivo de personas especialmente vulnerables, con el consecuente riesgo de generar sentimientos de rechazo y hostilidad social contra ellos".
El perfil del usuario contendía múltiples publicaciones de naturaleza xenófoba y racista, abiertas a todos los usuarios de Twitter, con "supuestas informaciones deformadas y/o falsas sobre los inmigrantes en general, todas presididas por un rechazo frontal e idéntico a la presencia de extranjeros a España, especialmente si sueño magrebíes o musulmanes". También colgaba mensajes similares a Instagram y Facebook.
El 7 de agosto del 2019, pocas semanas después del mensaje por el cual ha sido condenado, publicó un tuit con una cree celta, utilizada por los nazis, y con una frase de un líder del KKK: "Tenemos que asegurar la existencia de nuestra raza y un futuro por los niños blancos". A raíz de la querella de la fiscalía, el marzo del 2020 un juzgado de Martorell acordó el cierre cautelar de su perfil a Twitter. Más adelante ha cerrado el resto de perfiles a las redes sociales.
Por todo esto, ha sido condenado por un delito contra los derechos fundamentales y de lesiones a la dignidad de las personas por motivos discriminatorios con el agravante de difusión por internet.
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