Capgròs
Domingo 4 de febrero, el Ayuntamiento de Mataró, con la colaboración del Grupo de Historiadores Jaume Cuento, el Grupo de la Investigación de la Memoria Histórica de Mataró y el Grupo de Historia del Casal, organizó un acto en motivo del Día Nacional del Exilio y la Deportación, tal como propuso la CUP en un ruego presentado al Pleno Municipal del pasado 14 de diciembre de 2017.
El año pasado, el Gobierno de la Generalitat instituyó el Día Nacional del Exilio y la Deportación en memoria de los hechos acontecidos el febrero de 1939, cuando las principales autoridades de las instituciones republicanas atravesaron la raya fronteriza, camino del exilio, igual que hicieron decenas de miles de civiles y soldados fieles a la República, muchos de los cuales no volvieron nunca más a casa suya.
Las guerras y los contextos de represión siempre han generado exilios. Estos son una constante a lo largo de la historia que nos interpela de forma permanente sobre la condición humana de nuestras sociedades. Por eso es importante que Mataró recupere el testigo de los refugiados de guerra y del exilio republicano de 1939 y no olvide los miles de exiliados actuales.
Durante el acto de este año se reportaron las vidas de Paquita Pla y Bosch, Julià Vado y Masoller, Hermínia Puigsech y Puig, Salvador Cruxent y Rovira, Guillermina Peiró y Olivas, Francisco Verdalet y Guardiola y Esteve Rovira y Rovira. Se anunció la próxima colocación de adoquines Stolpersteine ante las casas de los mataronins deportados o humillados por los nazis, gracias al trabajo de documentación realizado por Bernat Endrina y Gemma Soriano. Se recordó, gracias a la investigación del historiador Ramon Salicrú, una lista –forzosamente incompleta- de los exiliados de Mataró, leída por los hermanos Ramón y Pablo Morales que sufrieron exilio y prisión en el tardofranquisme. Quedamos colpits por el testigo de un refugiado turco residente en Mataró. Disfrutamos con las poesías de Miquel Martí y Pol y Antonio Machado, leídas por el Grupo de Poesía Sueño de la Asociación del Casal Mataró –Jaume Terrades y con la interpretación musical de "Corrandes de exilio" hecha por el cantautor Marc Ràmia, así como también con las tonadas republicanas interpretadas por Esteve Guardiola con acordeón, algunas de ellas inéditas y recopiladas de exiliados que estuvieron en campos de concentración franceses por la etnomusicòloga Maria Salicrú-Maltas.
Conocer y reconocer las trayectorias vitales de los exiliados del Mataró de 1939 nos hace partícipes de la magnitud de la derrota, del dolor y de los sufrimientos impuestos por la dictadura fascista del general Franco, y a la vez nos sensibiliza, nos hace conscientes y solidarios ante los exilios del presente. Por eso, es imprescindible que la celebración del Día Nacional del Exilio y la Deportación tenga continuidad, y dé pleno sentido al Camino norteño o del Canigó, el GR-83, que empieza en la playa del Callao de Mataró y fenece en Prades, resiguiendo las pasas del exilio republicano de 1939.
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