La pesadilla de los barracones

El año 2005 los medios locales de la ciudad sacaban de titular: "Tres escuelas nuevas del Maresme iniciarán el curso en barracones". 11 años después, el titular vuelve a ser el mismo: "El curso empieza con módulos prefabricados a dos institutos mataronins". Ante este hecho, sólo podemos afirmar una cosa: ninguno de los gobiernos de la Generalitat (concretamente del Departamento de Enseñanza) ha apostado realmente por la educación pública y su consecuente planificación. Cómo se entiende qué a partir de los infinitos estudios demográficos, las instituciones no sean capaces de prever el que pasará en un futuro? Respuesta que a buen seguro, todas y todos sabemos, y que seguramente, coincidiremos: la carencia de interés de los diferentes gobiernos en el sistema educativo público. Entonces nos preguntamos: cuál es el origen del fracaso escolar? Respuesta fácil; el desinterés de la administración pública.

El año 2005, la ciudad de Mataró construía cuatro módulos prefabricados (barracones) en el Nuevo Parque Central de Mataró, los cuales tenían que acoger la futura escuela que tenía que dar servicio a la Vía Europa. El año 2007 se retiraron las últimas aulas provisionales del Nuevo Parque Central, que alojaban los alumnos de la escuela Antonio Machado. 9 años después de la retirada de los últimos barracones, la ciudad de Mataró ha tenido que volver a ver la colocación de dos módulos, instalados respectivamente en los institutos Alexandre Satorras y Thos y Codina, ante el aumento de demanda a la ESO. Una demanda que el gobierno de CiU ya sabía, y que ahora lo ha "arreglado" intermediado un "parche" (barracones) provisional, para condicionar este nuevo alud de alumnos a la secundaria.

Un incremento de alumnos que irá además en los próximos años, y que a día de hoy el Departamento (dirigido por la consejera Meritxell Ruiz, de Juntos Por el Sí) no sabe qué respondida dar. Aun así, es igual de cómplice el anterior gobierno municipal (CiU), que conjuntamente con el Departamento, no fueron capaces de trabajar para construir un nuevo instituto en la ciudad, capaz de enquibir el nuevo alumnado. Aun así, hay que hablar del estado actual de los edificios escolares públicos de la ciudad, que muchos se encuentran en fuerza mal sido y es más que necesario reivindicar edificios nuevos, más flexibles y adaptables a si hacen falta institutos o escuelas.

Es por lo tanto, un claro desinterés de los varios gobiernos, en especial los de CiU, en no haber o no haber querido gestionar una situación, que la ciudad de Mataró ni ningún otro, se merece. Ante todo ello, en un contexto donde se tendría que invertir más que nunca en el sistema educativo público, el gobierno de la Generalitat decide seguir subvencionando escuelas de la OPUS que segregan por sexo, dejando ciudades y pueblos en barracones. Hasta cuando lo seguiremos permitiendo? Ahora es más que necesario, que toda la comunidad educativa se una para decir BASTANTE y exigir una educación realmente: pública, laica, democrática, en catalán, inclusiva, coeducadora y de CALIDAD!