La energía sostenible del TubVerd también llega a los hogares

El TubVerd, con sus veinte años de historia, es una infraestructura ya instaurada en el imaginario de los mataronins, sobre todo como sistema de energía verde que alimenta equipamientos como por ejemplo centros educativos, sanitarios y deportivos de la ciudad. Así se configuró inicialmente, pero esta red urbana 100 % municipal de distribución de calor y de frío, que este 2021 celebra dos décadas de vida, ha ido creciente y extendiéndose, a nivel geográfico y también en variedad de usos. Muchos vecinos de Mataró desconocen que el TubVerd es, también, la principal fuente energética de las nuevas promociones de viviendas que se están construyendo al frente de la ciudad. Una serie de edificios que están cambiando el perfil de la capital del Maresme, y que a su arquitectura descaradamente moderna -torres relucientes, encristaladas y de diseño a menudo rompedor- suman un sistema energético innovador, sostenible, público (gestionado al 100 % por Aigües de Mataró) y alineado con el concepto de economía circular.

El TubVerd utiliza las energías sobrantes de dos importantes infraestructuras ambientales existentes al municipio, el vapor del Centro de Valorización de Residuos de Mataró y el biogás de la depuradora de aguas. Mediante una central de transformación de energía, el vapor y el biogás se convierten en calor que se traslada a un amplio abanico de equipamientos y edificios de viviendas de la ciudad a través de su red urbana de distribución (por cañerías enterradas). El servicio de frío, por su parte, se genera con refrigeradoras eléctricas de alta eficiencia condensadas por agua.

TubVerd es todo un símbolo de la apuesta de Mataró por la energía verde

Veinte años después de su implantación, el TubVerd es todo un símbolo de la apuesta de Mataró por la energía verde y por la reducción de las emisiones de C02. Su crecimiento a lo largo de las últimas dos décadas ha sido muy notorio; el 2001 arrancó con 2,5 kilómetros de trazado y tres equipamientos conectados. Actualmente la red se ha multiplicado casi por 10, y alcanza 18 kilómetros de calor y 2,5 de frío, para dar servicio a un total de 36 edificios. Entre los inmuebles "conectados" al TubVerd hay de todo tipo de tipologías: equipamientos señera de la ciudad como por ejemplo el Hospital y el TecnoCampus, centros para la tercera edad cómo el geriátrico Voramar, equipamientos deportivos (Eurofitness el Sorrall y cuatro pabellones municipales), o siete escuelas. Además, en los últimos años ha empezado a dar servicio en los edificios de viviendas de la Ringlera y en el futuro lo hará con los de Iveco-Pegaso y la ronda Barceló, incluida la torre de 26 plantas prevista al sector.

Actualmente hay hasta 309 viviendas que se nutren de la energía del TubVerd

Actualmente hay hasta 309 viviendas que se nutren de la energía del TubVerd, que pertenecen a 11 promociones inmobiliarias situadas al sector del Rengle. El año 2010 se conectaron los primeros dos bloques de viviendas y marcaron el camino por el resto de inmuebles del sector, entre los cuales figura la nueva torre de Solvia a la calle Ernest Lluch. La experiencia de los residentes con el TubVerd ha sido muy positiva, algo que ha dado impulso para plantear el salto de la red del TubVerd hacia el sector de Iveco-Pegaso, el nuevo ámbito de crecimiento en el frente marítimo. La promotora de la Torre Barceló ya ha contratado los servicios del TubVerd para conectar las 192 viviendas que lo conformarán.

El funcionamiento del TubVerd en las viviendas se puede asimilar al de una calefacción doméstica clásica. Los edificios que se conectan disponen de una sala técnica con dos circuitos cerrados, uno de agua fría y uno de caliente. La energía térmica del TubVerd se transfiere, a través de un intercambiador de calor, a los circuitos de agua fría y caliente del bloque de viviendas, de forma que se mujer servicio instantáneo tanto en el calentamiento de agua de uso doméstico cómo en la climatización del edificio

Qué ventajas supone el TubVerd? La lista es larga para residentes de las viviendas y los usuarios de los equipamientos que se alimentan, pero todavía lo es más para el conjunto de la ciudadanía de Mataró. Yendo por partes: a los residentes los supone un descenso de la potencia eléctrica contratada por vivienda, una reducción importante de riesgos puesto que hace innecesaria la instalación de gas, permite ganar espacio puesto que sustituye elementos cómo la caldera o la bomba de calor por un módulo térmico que se instala al rellano, y mejora la clasificación energética del edificio; todo ello, además de la gran comodidad que supone obtener agua caliente instantánea.

Mataró quiere situarse como ciudad de referencia en materia de energía verde

Todos estos son beneficios muy considerables, pero también hay que tener en cuenta las ventajas que el TubVerd comporta a nivel colectivo. La expansión de este sistema de distribución de energía, el hecho que cada vez llegue además hogares y equipamientos, supone un reaprovechamiento mayor de la energía sobrante de las infraestructuras ambientales existentes al municipio y, por lo tanto, una disminución del uso de fuentes de energía no renovables de origen fósil. Este hecho comporta una importante reducción de las emisiones de CO2 (se calcula superior al 70 %), además del aumento de la autosuficiencia energética (se reduce la necesidad de importar energía, cosa que también supone un ahorro económico). Energía verde, en definitiva, que contribuye a la sostenibilidad y respeto por el medio ambiente que, además, sitúa Mataró como ciudad de referencia en este ámbito. Algo que abre oportunidades para la creación de industria local especializada y de puestos de trabajo cualificados.

La apuesta de Mataró por la energía verde

El TubVerd tiene hoy, después de los 20 años de su puesta en marcha, más sentido que nunca. La preocupación por la huella ecológica que está dejando el impacto de la actividad humana es cada vez más grande, y en los últimos años movimientos cómo Fridays for Future han mostrado que crece la conciencia ciudadana respecto al hecho que el futuro del planeta corre peligro. Las ciudades empiezan a plantearse seriamente esta problemática, cómo demuestra el hecho que a Mataró, los grandes proyectos a medio plazo están vinculados a la protección del medio ambiente y a la sostenibilidad. El Parque de la Economía Circular, por un lado, y lo 'Mataró Urban Resilience Loops', por la otra, quieren lograr la transición ecológica en la gestión de los residuos y en el ciclo del agua, la energía y las infraestructuras naturales. Mataró confía en atraer empresas punteras de estos sectores y crear hubs de economía verde que, además, generen ocupación de calidad. Una lógica en la que el TubVerd y su modelo de energía sostenible y 100 % pública encaja a la perfección.