Manuel Cusachs

El Patio del Café Nuevo

Recientemente se ha inaugurado un nuevo espacio público: el Patio del Café Nuevo, con entrada por la Muralla de la Prisión y por la Riera. Mataró gana un nuevo espacio en el centro de la ciudad, gracias a la buena voluntad de las partes implicadas en este contencioso, como son el Patronato de la Sagrada Familia (titular del Centro Católico y propietario legal), la Unión de Cooperadores (propietario moral) y el Ayuntamiento de Mataró.

El Café Nuevo era una entidad cooperativa que desde antes de la Guerra Civil fue un centro cultural y recreativo del mundo cooperativista de Mataró y que después de la mencionada guerra siguió abierto durante unos años hasta que fue absorbido por la Alianza Mataronina, primero, y por la Inmobiliaria la Alianza S.A. después, ambas comandadas por un personaje clave en todo este asunto: Miquel Jornet, administrador y cerebro gris de la Mutualidad la Alianza. Este, que tenía una lucha a muerte con los cooperadores por el asunto de los locales, pocos años antes de morir decidió que el Café Nuevo pasara a manso del Centro Católico. Finalmente todo el asunto de los locales de la Unión de Cooperadores se está reconduïnt con enorme tacto, paciencia y buena voluntad por parte de todos los implicados. Ahora con la apertura del Patio del Café Nuevo la ciudad ve como se está poniendo un punto y final a un litigio vergonzoso y, a la vez, la ciudad ha ganado un nuevo espacio público.

El Teatro Euterpe
El lugar, pero, tiene más historia pues en este solar a finales del siglo XIX se construyó un teatro que ofrecería, además de funcionas teatrales, zarzuela, ópera, variedades y también espectáculos de circo, cine, bailes, así como mítines y otras actividades culturales y cívicas. El Teatro Euterpe se inició en 1878 y se acabó el 1921, casi medio siglo de vida intensa y variada donde los mataronins acudían con asiduidad.

Uno de los acontecimientos más relevantes en la vida de este teatro fue a principios de febrero del 1897 puesto que se proyectó por primera vez en Mataró una novedad que hacía furor, desde el 1895, en todo Europa: el cine.

Efectivamente: la primera proyección de cine en Mataró, de doble sesión, tuvo lugar, cómo hemos avanzado, el martes día 2 de febrero de 1897, coincidiendo precisamente con el día de la Candelera – Fiesta de la Luz. Por la tarde al Teatro Euterpe y por la noche se hizo el mismo programa al Teatro Principal (después Fomento Mataroní). El día siguiente el Diario de Mataró y la Comarca se hizo eco del acontecimiento con una extensa crónica que detalló el desarrollo de las dos sesiones. Justo es decir que la llegada del cine en Mataró fue acompañada con la actuación de un prestidigitador y endevinació, de una audición de gramófono y finalmente se proyectarían las “fotografías animadas”, por medio del Kinematógrafo. A pesar de todo la exhibición no fue del gusto del crítico pues “los cuadros eran de tamaño sobrado reducido y faltos de luz y de fijeza muchos de ellos, debido todo, según parece, a que miedo no poderse disponer de un potente foco eléctrico hubo de hecharse mando de luz Drumont”. Deficiencias aparte el Teatro Euterpe tiene el honor de haber sido el primer lugar donde se exhibió aquel nuevo divertiment que, tiempo a venir, congregaría a miles de mataronins que admirarían los films cada vez más perfeccionados de cine.

Según un estudio del médico mataroní Antoni Franqueza y Sivilla a la suya obra Tipografía Médica de Mataró, del año 1889, describe el Euterpe del que dice que era: “un bonito teatro de verano” y que ocupa una área de más de mil metros cuadrados. Describe el escenario, el sótanos ”de fácil ventilación”, los camerinos, la platea, y dice que tiene 18 palcos, y cinco aperturas de entrada a la platea. Que el alumbrado es de gas y que “la restante superficie está dividida en corredoras, plazoletas de castaños de Índias, bancos de piedra, etc. y café al aire libre.” Acaba diciendo que los espectadores tienen una sola apertura de acceso que da a la Muralla de la Prisión. propone otra por la Riera.

A la pista de la Euterpe a finales del año 1914 se presentó la troupe de la familia Frediani, unos acróbatas italianos que debido al éxito que tuvieron actuarían en nuestra ciudad otras veces. Incluso con el paso del tiempo una parte se estableció en Mataró definitivamente, fue el matrimonio formado por Fernando Frediani y Ana Pallarés.

Al Euterpe, cómo hemos dicho, se representaron teatro, óperas, zarzuelas, y cantaron los Corazones de Clavé de la localidad, bandas y orquestas. Y a nivel político los mataronins pudieron sentir los abrandats discursos de un Alejandro Lerroux (1903), a Pablo Iglesias (1908), participar a mítines y a actos conmemorativos del Primero de Mayo.

Según ha escrito Francesc Enrich y Regàs “Este teatro, que aconteció muy popular y concurrido por la ciudadanía, plegó velas, como se llama vulgarmente, en 1921, cosa de un año después de la gran reforma y mejoras introducidas en el gran teatro de la Rambla, o sea, Clavé.”

Creo que sería adecuada col•locar una placa en el Patio del Café Nuevo que recordara la existencia del Teatro Euterpe y de que a allí se proyectó cine por primera vez en Mataró, el martes día 2 de febrero del año 1897.

Comentarios