El No hay bastante más masivo

El No hay bastante nació en 2007 con la voluntad de dar vida por la noche del 28, que estaba huérfano de actividad después del baile de Requisitos. Fue una idea promover por las diferentes pandillas institucionales y se presentó como una Dormida nocturna. Un acto pensado para los que ya no van a las tradicionales dormidas, donde todo el mundo está delimitado por vallas y es parte pasiva del espectáculo. El relato explica que las figuras, que duermen en el Ayuntamiento, se desvelan y salen a bailar, mezclándose entre ellas y con la gente. La participación del público es la clave. Después de unas primeras ediciones un poco titubejants –cómo es lógico- el acto se consolidó rápidamente y bien pronto se instaló en el imaginario colectivo de la Fiesta Mayor, como un imprescindible. Cómo si siempre hubiera sido y fuera una tradición inmutable.

Después de unas primeras ediciones un poco titubejants el acto se consolidó rápidamente y bien pronto se instaló en el imaginario colectivo de la Fiesta Mayor, como un imprescindible

Con el paso del tiempo el No hay bastante se ha convertido en un tipo de "segunda Noche Loca" de Las Santas. A escala reducida, está claro, pero aconteciendo un acto cada vez más masivo. Y esto ha provocado tensiones entre los organizadores del acto, que a la vez son los portadores de las figuras. No es nada sencillo para ellos hacer bailar los gigantes o rociar la gente con fuego cuando ante el Ayuntamiento se reúnen miles de personas y todas quieren estar cerca de las figuras. Básicamente hay dos temores. Por un lado, que se pierda la esencia del acto –miedo que también se ha vivido con citas como el Desvelo, fruto de la masificación- y por la otra, la seguridad de portadores y del conjunto de asistentes.

Durante la presentación de Las Santas 2018, desde Cultura se informó que habría "cambios" en el No basta de este año, pero que no serían visibles por parte de los asistentes. Algo que se pensó por el hecho que este 2018 el día 28 madriguera en sábado, por lo cual se espera una gran afluencia de público al No hay bastante. Cada vez menos mataronins se lo quieren perder y también aumenta progresivamente el número de visitantes de fuera, puesto que el acto va ganando fama. Oriol Rodri, uno de los promotores del acto, explica que los cambios se vivirán sobre todo en los tumbos de las figuras. "Estas no cercarán, sino que estarán estáticas girando sobre sí mismas", constata Rodri, puesto que asegura que hacer el tumbo entero "es muy complicado". Otro de los cambios previstos son los bailes mezclados: en esta edición las figuras bailarán los bailes otras comparsas: la Momerota haciendo el baile del Dragón, los Gigantes el del águila, etc. También cambiará la orden de la salida de las figuras y se mantendrá todo el resto, como por ejemplo la Dormida y la música de la banda, un año más interpretada por La Principal de la Noche.

Las claves

• Nació en 2007 para ocupar el vacío que había la noche del 28
• Se presenta como una 'Dormida nocturna' y año tras año ha ido ganando popularidad
• habrá varios cambios en las salidas y movimientos de figuras para facilitar las cosas a los portadores