Conectando con el sabor de Nadal mataroní

Muchos mataronins viven su pertenencia en la ciudad con una cierta ambivalencia. Por un lado son muy críticos, a todo encuentran pegas, los cuesta mucho destacar los elementos positivos y siempre consideran que la ciudad vecina tiene más cosas por las que presumir (algo que es contradicho por los vecinos de estas ciudades cuando nos visitan y nos miran con ojos menos viciados por la costumbre). Por la otra, pueden hacer gala de un patriotismo exacerbado: cuando viajan, dicen primero de dónde son antes de que su propio nombre. Con Las Santas como emblema, presumen de ser renacuajos allá donde van, hasta el punto de poder resultar extenuants.

Seguramente en un punto medio entre las dos actitudes hay el equilibrio real. A pesar de que Mataró tiene muchos temas pendientes a resolver y muchos potenciales que habría que desarrollar, también dispone de otras muchas cosas de las cuales enorgullecerse. Una de ellas, sin duda, es la gastronomía. Durante la última década han aparecido decenas de nuevos restaurantes que, a precios aceptables, ofrecen una calidad más que buena, abrazando todo tipo de tradiciones culinarias, desde las más nostrades y de proximidad hasta las más exóticas. A esto se suma la proliferación de tiendas de comer preparado que, debido a la dura competencia porque cada vez son más numerosas, ofrecen recetas de lo más elaboradas a precios muy asequibles. En el entorno de plaza de Cuba, por ejemplo, se ha establecido un 'hub' de este tipo de establecimientos que hace perder las ganas de entrar a la cocina propia nunca más.

Este año, la campaña navideña del Ayuntamiento de Mataró invita a "conectar con la gastronomía" como uno de los tres elementos principales de las fiestas a la ciudad (los otros dos son la "ilusión" y "la tradición") de cara a poner en valor que en la capital del Maresme no hay excusa por, puesto que por fiestas parece inevitable atipar-se, como mínimo poder hacerlo con las mejores comes.

Sello propio muy dulce

Si hay algo, en este mismo sentido, del cual Mataró se puede sentir orgulloso, es de sus pastelerías y confiterías. A los establecimientos "de toda la vida" se han sumado de nuevos, que de alguna manera han llenado el vacío que ha dejado la marcha de pastelerías vinculadas a la historia reciente de Mataró como Can Miracle o, más recientemente, Olmos. Nuevos establecimientos, como por ejemplo el Nougat de la calle Sant Josep, que se han sumado a una tradición muy propia de la ciudad: presentar productos con sello 100% propio vinculado a fechas como la Navidad. En Mataró, cuando llegan las fiestas no se compran tan sólo turrones o barquillos; cada establecimiento tiene su propio emblema, que lo distingue del resto. Torró de Autor de la Uñó, el Panettone de la Sacher, el turrón solidario de la Nougat en colaboración con la Fundación Maresme o, evidentemente, los barquillos de Can Graupera, son algunos de los ejemplos que más han arraigado en la ciudad.

Que te lo hagan todo

Siguiendo en esta misma línea, los restaurantes mataronins, y también del en torno a la ciudad, ponen toda la carne a la parrilla para ofrecer menús auténticamente fastuosos por las fechas navideñas. Citas donde se pueden disfrutar las recetas más tradicionales, como el escudilla, la carne de olla y el pollo con ciruelas del día 25, o los canelons de Santo Esteve, ya sea con la receta de la abuela o con un contrapunto que los haga diferentes; o bien con propuestas más trencadores, por aquellas familias más dispuestas a apuestas gastronómicas diferentes. La realidad es que cada vez son más los establecimientos que se vuelcan al ofrecer menús atractivos por Nadal, puesto que las costumbres de las familias también están cambiante: hace años era muy extraño celebrar la Navidad fuera de casa, lejos de la mesa familiar, y ahora cada vez son más los que apuestan para no complicarse la vida, en especial si las familias son muy numerosas, y hacer la comida fuera.

Un escaparate de producto fresco y próximo

Pero para los quién siguen prefiriendo cocinar por las fiestas, Mataró ofrece el mejor. Durante estos días es todo un placer pasear por los 9 mercados municipales de la ciudad, como por ejemplo el de plaza de Cuba o la plaza Grande pero también por los de los diferentes barrios, donde las paradas exponen su mejor producto para las mesas navideñas. En Mataró se puede disfrutar de producto de proximidad de gran calidad para elaborar todas las recetas necesarias por estas fiestas, desde el pescado y el marisco fresquíssim procedente del Puerto de Arenys, hasta las verduras y frutas cultivadas al mismo término municipal mataroní, a los huertos de las Cinco Sènies, que se preservan como sol agrícola en un entorno densamente urbanizado. A los mercados, los mataronins también pueden celebrar la Navidad con actividades para toda la familia como la gran escudilla en la plaza Grande o el taller de decoración de galletas de Nadal y la Cagada del tió al Mercado de la plaza de Cuba.

Markets y otras actividades

Este año también se podrá disfrutar de propuestas gastronómicas en las fechas previas a la Navidad a la primera edición del Semproniana Street de diciembre. Hasta ahora este 'market' se ha celebrado, con mucho de éxito, en fechas veraniegas al Parque Central. Ahora llega la propuesta navideña que ofrecerá las últimas tendencias en gastronomía, además de moda y complementos, los días 14 y 15 de diciembre en pleno corazón de la ciudad: en la plaza del Ayuntamiento, plaza de Santa Maria, calle Santa Cristòfol y plaza Chica.