Capgròs
Burriac Ataque es un mito para los amantes del trail, una modalidad -las cursas de montaña- que cada vez cuenta con más adeptas. La prueba organizada por el Centro Excursionista de Vilassar de Mar es una de las cursas nocturnas más populares de Cataluña (la "Fiesta Mayor de las cursas nocturnas", como la definen sus promotores) especialmente por su gran recorrido, no exento de mucha dureza. Impulsada con la colaboración de los ayuntamientos de Vilassar de Mar, Cabrera de Mar y Cabrils, cuenta con cerca de 20 kilómetros por corriols de montaña con final a la playa, que le otorga un encanto especial. Este sábado, día 3, se celebra una nueva edición.
Un gran desnivel
El hecho de disputarse por la noche, con salida y llegada a cero metros a nivel del mar haciendo la cumbre del castillo de Burriac, son algunos de sus alicientes. El circuito cuenta con un desnivel positivo de más de 1100 metros y uno de acumulado de más de 2.300, muchísimos si se tiene en cuenta que la cursa supera por poco los 20 km de distancia. Su punto más alto se encuentra en 466 metros, en el castillo de Burriac, emblema de la carrera.
Chiquillo Ataque
Las inscripciones para la edición de este año quedaron completadas el pasado 30 de julio, un mes antes de celebrarse la prueba, una nueva muestra de la popularidad de la cursa. El mismo día de la Burriac Ataque, a las 18.30h, se celebrará la tradicional Chiquillo Ataque. Una cursa no competitiva, para niños de cero a 14 años, que transcurrirá por las calles de Vilassar de Mar. La inscripción se hace on-line y costa 4 euros.
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