Capgròs
La paralización de la actividad económica y laboral debido a la pandemia de Covid-19 ha comportado una fuerte caída de la siniestralidad laboral en el Maresme durante el segundo trimestre del año. No obstante, la comarca mantiene unos índices de accidentes en el lugar de trabajo más elevado que al conjunto de Cataluña.
Según los datos hechos públicos por el Consejo Comarcal, entre los meses de abril y junio se comunicaron 461 siniestros con baja laboral, un descenso del 47,01% respecto al trimestre anterior y de un 52,03% en comparación con el mismo periodo de 2019.
Este descenso, pero, no impide que el Maresme mantenga un Índice de Incidencia más elevado que el total de la provincia de Barcelona y que el conjunto de Cataluña. Este indicador permite ver mejor la evolución de la siniestralidad laboral porque relaciona el número de accidentes declarados por cada 100.000 afiliaciones a la Seguridad Social. En el caso del Maresme, según recoge el Observatorio de Desarrollo Local en su informe, el Índice de Incidencia durante el segundo trimestre del año fue de 481,52 siniestros por cada 100.000 afiliaciones cuando en el conjunto de Cataluña se situó en 441,60 y en la provincia en 393,90.
En este ámbito, el pasado 31 de agosto se tuvo que lamentar la muerte de un trabajador, vecino de Premià de Mar, en un accidente laboral en Vilassar de Mar. El trabajador se encontraba en el techo del edificio haciendo tareas de mantenimiento de los aparatos de aire acondicionado, cuando sufrió el accidente
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