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Hoy en día casi todo el mundo ha emprat o al menos ha sentido hablar de PayPal . Se trata de uno de los sistemas de pago online más famosos en todo el mundo, para enviar pequeñas o grandes cantidades de dinero de una manera rápida y sencilla, además de contar con el útil cambio de divisas. Ante este escenario, en el cual triunfan sistemas americanos cómo el mencionado además de Mastercard, Visa o Apple, los bancos europeos están planeando una estrategia conjunta para poder hacer frente este "oligopolio" dominado por los Estados Unidos. Os lo explicamos.
La estrategia de los bancos europeos ante los gigantes americanos
"La idea es construir un campeón europeo de pagos que pueda asumir PayPal, Mastercard, Visa, Google y Apple", comenta Joachim Schmalzl, presidente de la Iniciativa Europea de Pago.
Los encargados de diseñar este plan son los 40 expertos que conforman una empresa con sede a Brussel·les. Aparentemente tienen hasta el próximo mes de septiembre para elaborar un plan para un servicio de pagos paneuropeu que se pueda utilizar tanto para pagar en linea como tiendas, para liquidar facturas entre consumidores individuales y retirar efectivo a los cajeros automáticos. El proyecto cuenta con el apoyo de la Comisión Europea y de los reguladores financieros de la zona del euro.
La Comisión Europea ha descrito esta iniciativa cómo "un nuevo proyecto ambicioso y europeo", además de añadir que creen que los ciudadanos y las empresas de la UE nos beneficiaremos de una solución de pagos rápida, eficiente y fiable, sobre todo si cubre un amplio espectro de comunidades bancarias europeas. Hay que recordar que actualmente los pagos con tarjeta a Europa son procesados principalmente por empresas con sede a los Estados Unidos. De hecho, las estadísticas nos indican que cuatro de cada cinco transacciones a Europa son gestionadas por Mastercard y Visa, según EuroCommerce, grupo de presión de minoristas europeos.
"Queremos ofrecer una alternativa a este oligopolio y dar a los comerciantes y a los consumidores a Europa una opción real. Nadie [a Europa] puede competir por si suele con los gigantes de las tarjetas de crédito norteamericanas. Esto será posible si formamos equipo", recuerda Schmalzl cuando advierte que una cuota de mercado tan dominante puede perjudicar los consumidores y los comerciantes debido a las tarifas relativamente altas presentes a la actualidad.
No es el primer golpe que se intenta una estrategia así. El "Proyecto Monnet", que el 2011 contó con el apoyo de 24 prestamistas europeos, vaciló porque no tenía apoyo político y no consiguió desarrollar un modelo de negocio viable. Este golpe es diferente porque el proyecto está reforzado por la Unión Europea, así que se espera que los resultados sean más favorables. El punto determinante en su éxito llegará después del verano, cuando los patrocinadores del consorcio decidirán si seguirán adelante con la idea, puesto que requeriría una financiación adicional importante.
Se estima que, si todo avanza según el planteado, las primeras aplicaciones de este sistema de pagos electrónicos en tiempo real entre consumidores se podrían lanzar a principios del 2022, mientras que una segunda herramienta de pagos con más opciones podría llegar a la segunda mitad del año próximo, según apunta Joachim Schmalzl.
Fuente: Financial Times
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