Capgròs
La pandemia del coronavirus incide en las desigualdades económicas y agrava los problemas de salud mental entre la población joven. Lo indica el Observatorio Catalán de la Juventud (OCJ), que este jueves ha presentado lo informo 'Condiciones de vida, ocupación y desigualdades en salud de la población joven ante la covid-19'. El 68% de los jóvenes que ya se encontraban en una situación económica vulnerable antes de la pandemia declara que su economía ha empeorado, mientras que el informe recoge que 39% de retroceso entre los que no se encontraban. Los autores del informe, encargado en la Universitat Pompeu Fabra en colaboración con otros centros de investigación, advierten que los problemas económicos repercuten en la salud física y mental.
El estudio destaca "la acumulación de desventajas y el ensanchamiento de las desigualdades sociales, así como la debilidad del sistema". Entre las causas que han llevado a esta situación hay la profundización de las desigualdades en el mercado laboral, recoge el informe, presentado este jueves por la directora general de Juventud, Laia Girós, con la coordinadora del estudio, Mireia Bolívar (UAB).
El 30% de los encuestados afirmaron que a su hogar tendrían dificultades económicas; el 32%, que sin ningún ingreso a su hogar podrían subsistir hasta sólo dos meses; el 17% decían que sólo podrían subsistir un mes y el 16% declaraba haber tenido que recurrir a la ayuda económica de familiares por la pandemia.
El colectivo que ha vivido el confinamiento con más dificultades
El informe también muestra que el colectivo joven es el que ha vivido el confinamiento con más dificultades. Las personas de entre 16 y 29 años obtienen una puntuación mediana de 7,4 en una escalera del 0 al 10 que evalúa el grado de dificultad del confinamiento (0 significa muy difícil y 10 muy fácil). Se trata de la puntuación más baja en comparación con los otros grupos de edad, puesto que las personas de 30 a 44 años obtienen un 7,8 de puntuación; las de 45 a 64 años, un 8,1 y las de 65 años o más, también un 7,8. Sobre la capacidad de gestionar el confinamiento, la población más joven obtiene una puntuación mediana de 5,7 (6; 6,5 y 6,5 en las siguientes franjas de edad).
El estudio señala otros factores que han agravado los problemas a la hora de afrontar el confinamiento entre las personas jóvenes, como haber perdido el trabajo; no tener estudios universitarios; tener dificultades para llegar a final de mes durante la pandemia y ser mujer y joven.
El informe también indica que las personas que provienen de hogares familiares más favorecidas, con mayor nivel de estudios y que han podido llevar a cabo la transición al mercado laboral de forma más satisfactoria son también las que han podido afrontar el confinamiento en mejores condiciones.
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